El Córdoba tendrá que esperar

Tras 42 años de espera para regresar a la máxima categoría del fútbol español, el Córdoba, transcurrido un tercio de Liga, sigue sin lograr su primera victoria. El peaje en la élite se le está haciendo demasiado indigesto al conjunto de Djukic, que cogió el testigo de Albert Ferrer. Más que en el banquillo la solución está en el terreno de juego. A los jugadores del Córdoba no les alcanza el nivel. Venció el Villarreal con solvencia y sin alardes, a partir de una gran acción de Vietto (21 años), que abrió el camino de la victoria del Villarreal, refrendada luego con un gol de Uche mediado el segundo tiempo. Dos triunfos en una semana que le sitúan de nuevo en los puestos europeos, en sexta posición, empatado con el Málaga.

Faltó pausa en las entregas, tanto en Córdoba como en el Villarreal en el inicio del encuentro. Tampoco hubo vértigo, pendientes ambos equipos más de no cometer errores que de asumir riesgos. Comprensible en el Córdoba, que desde la llegada de Djukic a la dirección intenta resultar incómodo al rival, crecer a partir de la organización. Y no lo consigue.

En el tablero del Arcángel, las mejores piezas, a pesar de las bajas, eran de un Villarreal al que le bastó con una arrancada de Cheryshev, imparable para los defensores del Córdoba y una frenada en seco, un control orientado y un giro rápido de cintura del liviano Vietto, para desmontar el entramado cordobés. Solo al final del primer acto, con más pasión que criterio, el conjunto de Djukic se acercó con cierto ánimo a la portería de Asenjo. La afición cordobesa recriminó a su equipo el desarrollo de los primeros 45 minutos y al terminar el encuentro recriminó al palco la marcha de su equipo.

Plano en el juego, el Córdoba descargó su adrenalina con el imberbe Vietto, al que los jugadores andaluces recriminaron que fingió una lesión para después intentar marcar un gol en la acción posterior. Los futbolistas verdiblancos intentaron amedrentar con triquiñuelas al delantero argentino con la cara de adolescente que reflejan los 21 años que cumplirá el próximo viernes. Necesitaba algo el Córdoba para levantar a su afición y acelerar sus pulsaciones y encontró la excusa en la trifulca. Una gran acción individual de Fede Cartabia, el jugador con más nivel con diferencia en las filas de Djukic, que atajó Asenjo, hizo creer al Córdoba al menos en el empate. La candidez defensiva del conjunto cordobés hizo imposible el reto. Defendió mal un saque de esquina y Uche, casi sin quererlo y con los tacos, puso la puntilla a un Córdoba que no sabe que es sumar un triunfo en regreso a Primera. Le falta el poso que sí tiene el Villarreal.