La guardería de Estados Unidos

El ayuntamiento de Bilbao ha contratado a Morgan,un águila que sobrevuela el museo Guggenheim para espantar a las palomas que se esconden en los recovecos de la infraestructura. Harden, Rose y el resto de estrellas estadounidenses pueden ver a la rapaz desde sus habitaciones del hotel Domine, cerca de la ría. Pueden verlo si deciden asomarse a contemplar la ciudad, porque no parece que los chicos de la NBA estén muy interesados en el turismo ni que tengan muchas opciones de estirar las piernas. Estados Unidos se mueve rápido, dentro y fuera de la pista, ida y vuelta del hotel a los entrenamientos en el megalómano BEC (Bilbao Exhibition Center) y en Miribilla, refugiada la expedición en dos autobuses con los cristales negros tintados y rodeada de policía local y seguridad privada. Algunos miembros acudieron a San Mamés al Athletic-Nápoles, pero no los jugadores, a quienes el fútbol que emitían las televisiones del hotel debió de parecerles menos interesante que sus móviles.

No quiere distracciones el equipo de Mike Krzyzewski en la lucha por igualar los cinco oros mundiales de Yugoslavia. Apenas giran el cuello los jugadores, y mucho menos se paran, cuando un pequeño grupo de chavales grita sus nombres tras una valla. Solo Harden sale de su ensimismamiento y se descuelga los cascos cuando un agente le insta a bajar la mirada y atender al niño que le pide una foto. Ellos son las estrellas, y quieren dejarlo claro.

“Queremos ser el Winning Team [equipo ganador]”, dice con su pose militar Coach K, una especie de sargento al mando de una tropa de jóvenes egos. Estados Unidos es el benjamín del Mundial con una media de edad de 24,08 años, más de cuatro menos que España (28,2), mientras que Brasil (31) y la República Dominicana (32) son las más veteranas. Esta versión de la NBA es la más joven desde la que compareció en los Juegos de Atenas 2004 (con un LeBron de 19 años), descabalgada en semifinales por Argentina. Más joven que los conjuntos que ganaron los oros en los Juegos de 2008 (26,2 años), el Mundial de 2010 (24,6) y los Juegos de 2012 (25,6). Rudy Gay es con 28 años el padre del grupo actual, y el único junto a Rose y Curry que repiten del Mundial anterior —solo Davis y Harden repiten de los Juegos—. “Es un equipo joven, orgulloso de representar a su país, buenos tipos, nada egoístas”, afirma Coach K. “Debemos seguir creciendo. Esta es una oportunidad para que todos estos jóvenes crezcan”.

Con 28 años, Rudy Gay es el ‘padre’ del conjunto de jugadores de la NBA

La guardería la lidera Anthony Davis, el pívot de 21 años de los Pelicans que ha comandado el ataque en los cuatro partidos de preparación. Contra Brasil, República Dominicana, Puerto Rico y Eslovenia, los estadounidenses promediaron 103 puntos en su casillero por partido, con 29 de ventaja media, y Davis fue el máximo encestador (13,8) por delante de Harden (13) y Curry (11), colocó 15 tapones y solo Faried capturó más rebotes (6,8 por 6,5).

El alcalde de Bilbao, Ibon Areso, hizo ayer de anfitrión para extender su mano a la NBA. “Si perdemos por dos puntos a falta de 30 segundos, te llamo”, bromeó Krzyzewski. El técnico tiene enchufados a sus muchachos, incluido Rose, “sano y listo para jugar”, uno de los velocistas del equipo junto a Irving, Curry, Harden, Gay... El águila no quiere que las palomas se le escapen.