Alexis como síntoma

Las áreas técnica y deportiva no cedieron. “Hay que vender a Alexis y Cesc”, solicitó enérgicamente en una reunión informal durante la pretemporada el entonces presidente del Barcelona, Sandro Rosell. “¿Prefieres al titular de la sub-21 que al de la absoluta?”, le hicieron recapacitar, en referencia a la pretensión de Rosell de incorporar a Isco —ahora en el Madrid— en detrimento de Fàbregas, que rechazó en el verano por dos veces al Manchester United. “¿Y quién tiene lo que da Alexis al equipo, con velocidad, regate y gol?”, abundaron. Argumentos que validaron la continuidad de ambos, por más que hubieran sido gusto y deseo de Pep Guardiola en su día, también de Tito. Cesc, tan autoexigente como irregular, dotó de puntería al equipo al inicio del curso, referente para el juego directo que impuso Tata Martino. Y Alexis, criticado por su falta de desborde e imprecisión en el pase, se rebeló con tenacidad y redes, síntoma de que algo falla en el Barça porque un supuesto actor secundario es el pichichi liguero del equipo, toda vez que acumula 16 dianas por las 15 de Messi y las 13 de Pedro.

Creo que Tata también es un motivador para ganar todo y volver a ganarlo"

Desde buen inicio del curso, Martino siempre se significó en cuanto al chileno. “Lo he visto jugar mucho en Sudamérica, con Chile y con River. No lo empecé a conocer en el Udinese como gran parte de la gente. Y por eso le dije que quería ver al jugador de la selección de Marcelo Bielsa [exselccionador de Chile]”. Así lo cree Alexis, que resalta la virtud azuzadora del técnico. “Guardiola motivaba al jugador y Tito era más de decir por dónde atacar y por dónde no. Y creo que Tata también es un motivador para ganar todo y volver a ganarlo”, reflexiona; “Pep y Tata motivan mucho”. Con confianza, el extremo ha firmado su mejor temporada goleadora de su carrera (en el último año del Udinese autografió 12 goles ligueros), al tiempo que también cuenta con seis asistencias, por las 12 de Messi y las ocho de Pedro y Cesc.

La vuelta de La Pulga y sobre todo de Neymar, en cualquier caso, le han restado flashes y minutos, hasta el punto de que solo ha sido titular en uno de los tres últimos duelos ligueros y frente al City jugó en el primer acto, relevado después por Neymar como si le cediera el testigo de la titularidad. “¿Perder protagonismo?”, se cuestionó, aunque Pedro parezca ahora asentado en el flanco derecho; “yo me veo bien, contento con el equipo. Acá no hay competición y me siento cómodo con el entrenador y compañeros”. Los guarismos le dan la razón, quizá porque no ha sufrido lesión alguna: cuenta con 23 encuentros en la Liga, solo por detrás de Pedro y Cesc (26), también de Iniesta (24). Se da la coyuntura, sin embargo, de que con las vueltas de Leo y el brasileño el Barça ha perdido la pegada y el fútbol, también 11 puntos en la segunda vuelta por los siete que malograron en toda la primera ronda. “Sin Leo tenemos más trabajo; es más difícil jugar sin el mejor del mundo al lado”, replica el chileno.

Autor de un tanto antológico y decisivo en el clásico, la asignatura pendiente de Alexis es la Champions, sin gol en este curso. No se sabe si saldrá de inicio ante el City como tampoco se le exige lo que a Messi y Neymar. Aunque el 9 lo tiene claro: “Es un partido importante, quiero jugar”.