“Este equipo tiene un núcleo tan bueno que no se altera con los cambios”

Los líos de los despachos se suceden en el Barcelona, dimitido ya el presidente Rosell, con una investigación de la Comisión Europea abierta por posibles irregularidades fiscales, con el fisco del Santos y la justicia española desmenuzando los acuerdos paralelos al contrato de Neymar… Pero todo eso no agita a los futbolistas. “Tenemos que pensar en jugar, que es lo que sabemos hacer”, defendió Iniesta. “Estamos tristes por la marcha del presidente, pero tenemos que pensar en la competición”, añadió Adriano. “La verdad, yo no entiendo de estas cosas”, se sinceró Alexis. Y lo mismo opina Martino, que actúa de cortafuegos entre la zozobra institucional y la tarea deportiva. “De una vez por todas habría que reconocer que el epicentro del Barcelona son los futbolistas. Exclusivamente ellos”, reflexionó en voz alta Martino, más para alabar a su grupo que para desprestigiar a los otros entrenadores o directivos del pasado, toda vez que siempre ha manifestado su admiración por Pep Guardiola, por ejemplo. “Y un equipo que no deja de ganar nunca esté quien esté, es que tiene un núcleo central muy bueno que no se altera con cambios”. Un equipo que ahora apunta al Valencia de Pizzi. “Indudablemente, ha tenido una evolución en el juego, como en los cuartos de Copa ante Atlético y como ante el Málaga. Irá a más”, señaló el técnico azulgrana.

Martino es la pausa del Barcelona. Un discurso bien diferente al entonado al inicio de curso, cuando siempre iba a la defensiva, cuando tiraba de estadísticas para defender sus ideas y negar las evidencias, como que el equipo jugaba más directo que antaño. Pero el balón le da la razón, al menos en cuanto a resultados, y entiende que rebajar la agitación es básico para competir. Por eso evita los titulares, las afirmaciones categóricas. “¿Llegará Neymar ante el City?”, le cuestionaron. “Esperamos que esté bien para ese partido porque se nos ocurre a todos que es un partido clave, pero si no está, pues no jugará. No se me ocurre en poner en riesgo al jugador”, señaló. “¿Cambia que no esté Agüero delante?”, le preguntaron. “No creo, pero ni siquiera he pensado en ese partido. Supongo que les afectará más a ellos, pero hay que esperar”. “¿Qué le parece jugar tantas veces a las 10 de la noche?”, le cambiaron de tercio. “No parece apropiado, aunque supongo que algún motivo habrá. Pero no tengo la respuesta adecuada”, replicó.

Antes del entrenamiento de este viernes, Martino charró con Messi en un apartado –sobre una operación del mercado invernal que no quiso desvelar- durante unos minutos. Ocasión, en cualquier caso, que le sirvió para subrayar a sus jugadores de nuevo. “Hablo con todos porque me resulta muy agradable. Siempre es enriquecedor hablar con estos futbolistas, a los que me toca dirigirlos desde la admiración”, aclaró. Pero Martino sabe que todo se resolverá en estos meses, que la temporada se evalúa desde la sala de trofeos. Así que cambió el discurso, firme en su opinión. “Desde ahora, cada equivocación se paga muy cara cara. Es tan importante el partido del Valencia, como las semifinales de Copa, como el primer partido de Champions… Se terminó el margen de error”, expresó, al tiempo que dejó entrever que las rotaciones no se darán tan a menudo en los duelos capitales, por más que “estemos conforme por cómo ha salido todo, porque los jugadores se sienten importantes a su manera”. Frente al Valencia, sin embargo, rotan Puyol –“no repetirá partidos”, explicó- y Montoya.