Adán llega al coladero del Betis

Buena parte de los problemas del Betis, colista de la Liga, a 10 puntos de la salvación, radican en el pésimo nivel ofrecido por sus dos porteros, el argentino Sara y el danés Andersen, llegados el pasado verano. El cuadro andaluz es el segundo más goleado de la Liga, con 47 tantos encajados, y ha emprendido una carrera para reforzarse en busca del milagro de la permanencia. El primero de los fichajes en llegar en esta semana fue el meta Antonio Adán, que ha rescindido su contrato con el Cagliari y llegó al Betis libre después de un desafortunado paso por el fútbol italiano. Adán, de 26 años y 1,90 metros de estatura, es un portero de garantías para los técnicos del Betis a pesar de que en las últimas tres temporadas no ha llegado a jugar 10 partidos seguidos en cada una de ellas.

La trayectoria de Adán quedó marcada por los acontecimientos ocurridos en la pasada temporada, cuando el portero fue víctima del conflicto entre el entonces entrenador del Madrid, José Mourinho, y el internacional Iker Casillas.

Adán pasó en mes y medio de quitarle la titularidad al capitán español a no contar para nada. Mourinho lo puso de titular en el partido jugado de Liga en La Rosaleda, donde el Madrid perdió por 3-2. Jugó dos partidos de Liga más, ante la Real Sociedad (4-3), donde fue expulsado, y el Getafe (4-0), los dos en casa. Adán jugó, además, cuatro encuentros de Copa y dos de la Liga de Campeones. No obstante, tras el encuentro frente al Getafe dejó de contar para Mourinho, que fichó a Diego López en el mercado invernal. El exmeta del Sevilla se hizo con la titularidad incluso por delante del propio Casillas.

Adán pasó en un mes de la titularidad en el Madrid al desbancar a Casillas a no contar para Mourinho

Adán, después de 16 años en el Madrid, rescindió contrato con el equipo de toda su vida en el mes de septiembre. Luego, estuvo sin equipo, entrenando en solitario, hasta que a finales de noviembre fichó por el Cagliari. En Italia ha jugado dos partidos. El 5 de enero defendió la portería del Cagliari ante el Chievo Verona, sin encajar goles, pero su rendimiento dejó que desear en la derrota de su equipo ante el Juventus (1-4). Adán apenas pudo hacer nada en los dos goles de Fernando Llorente, pero sí falló en los tantos anotados por Lichtsteiner y Marchisio.

Adán pasó el reconocimiento médico y estampó su firma con el Betis por lo que queda de temporada. Renovaría un año más si el equipo andaluz logra la permanencia. “Después del partido ante el Real Madrid me quedé con la sensación de estar ante un club grandísimo a nivel social por el sentimiento que mueve. Ese es el principal motivo por el que me he decidido a venir. Soy consciente de la situación en la que está el Betis, pero tenía que dar este paso de valentía”, explicó ayer el guardameta madrileño en declaraciones a la web oficial de la entidad andaluza. Tras pasar el reconocimiento médico, Adán entrenó con sus nuevos compañeros, con los que se marchó de concentración a la costa de Huelva.