_
_
_
_
_

El Valencia despide a su director deportivo

Salvo acusa a Braulio Vázquez de una mala planificación de la plantilla y exime a Djukic

La plantilla del Valencia, en el entrenamiento del lunes.
La plantilla del Valencia, en el entrenamiento del lunes. DAVID GONZALEZ (AS)

El presidente del Valencia, Amadeo Salvo, ya ha encontrado un culpable de la mala marcha de su equipo (a mitad de tabla con 16 puntos en 12 jornadas): Braulio Vázquez, el hasta este lunes su director deportivo. Este tenía un contrato blindado firmado por el anterior presidente, Manuel Llorente, por lo que deberá ser indemnizado con unos 760.000 euros.

Salvo lo despidió a distancia, desde su periplo por Asia, donde el presidente ha estado buscando inversiones para la entidad de Mestalla. Lo culpa de una plantilla “mal construida y descompensada”, sin la mentalidad adecuada. Y exime de toda responsabilidad al entrenador, el serbio Miroslav Djukic. Vázquez (Pontevedra, 1972) fue un jugador modesto de la cantera del Deportivo que llegó a la secretaría técnica del Valencia en 2008 como ojeador de la mano de Fernando Gómez, entonces director deportivo, quien lo conocía de haber compartido vestuario en el Castellón. Al ser despedido Fernando por Llorente en 2010, Braulio pasó a ser el máximo responsable deportivo.

Salvo ha pensado en Rufete, exinterior derecho del Valencia y actual director de la escuela de Mestalla, como el sustituto ideal. El presidente pretende que Rufete compagine ambas funciones. Solo si este lo rechazara, Salvo pensaría en otra alternativa.

El presidente pretende que Rufete, director de la escuela, también asuma la secretaría técnica

El presidente pretende regenerar la plantilla y para ello se ha lanzado en brazos del poderoso agente portugués Jorge Mendes. La primera operación de este se concretó este lunes. El Valencia anunció la contratación de central portugués Rubén Vezo, de 19 años, procedente del Vitoria de Setúbal. Vezo podrá empezar a jugar en enero y viene a sustituir al francés Rami, cedido al Milan después de haberse enfrentado a Djukic y haber proclamado que sus compañeros son todos “unos pelotas”.

A Braulio le han condenado sobre todo sus fichajes del pasado verano, los delanteros Helder Postiga (tres millones) y Pabón (siete), para suplir la marcha de Soldado al Tottenham por 30. Braulio se defiende con que tenía apalabrado a Giovani dos Santos, pero Salvo no le dio el visto bueno y aquel acabó en el Villarreal.

El principal acierto de Braulio fue Ernesto Valverde como técnico para enmendar la apuesta presidencial de Llorente por Mauricio Pellegrino, en noviembre del año pasado. Otros fichajes de los que estaba orgulloso fueron Jonas, Parejo y Canales. En contra, las contrataciones de Víctor Ruiz por ocho millones y la de Piatti por siete.

 

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_