Alexis vuelve a ser ‘Maravilla’
El delantero chileno regresa a Italia, donde se ganó el respeto del fútbol mundial jugando con el Udinese
En Italia, Alexis Sánchez llegó a creerse el mejor jugador del mundo. Seguramente, le sobraban motivos. Su equipo, el Udinese, peleaba por los puestos más altos de la clasificación en la Serie A y él, apenas 20 años, después del Mundial de Sudáfrica, jugó 31 partidos, marcó 12 goles y dio 10 asistencias en su última temporada, la 2010-2011, vestido de blanco y negro. Su rendimiento llamó la atención del Manchester United, del Chelsea, del Inter y de la Juve hasta escoger al Barcelona. “Le irá bien”, aseguró Bielsa cuando supo de su fichaje por el club catalán. “Descubrirá que el mejor es Messi y nunca será tan bueno como Leo”, le dijo. Lo que no esperaba es que en su aterrizaje en el Camp Nou se diera de bruces con la realidad de un club capaz de triturar el talento de los mejores. Y a punto estuvo de hacerlo con el Niño Maravilla, que a ratos pareció haberse olvidado en Italia la maleta donde había guardado su magia.
Llegó un punto, no hace tanto, que en el Camp Nou su juego daba antes para la mofa que para el elogio. Sobrevivió, aferrado a la confianza que le dio Guardiola, a su deseo por triunfar, a su voluntad por vivir entre los mejores, hasta darle la vuelta a su realidad como quien gira un calcetín. Le pidió Martino que fuera el que conoció en el River, ese jugador al que en su día sufrió cuando era el seleccionador de Paraguay y se enfrentó a Chile. Alexis lo ha conseguido. El Tata ha sacado lo mejor del tocopillano, que lleva cuatro goles y tres asistencias y se ha convertido en en el tercer hombre del ataque azulgrana, compañero de línea de Messi y Neymar, titular en ocho partidos de Liga y en los dos de la Liga de Campeones. Si no jugó en Pamplona fue, precisamente, porque Martino lo guarda para San Siro, para un partido grande.
Siempre tuvo madera de Niño Maravilla , incluso cuando jugaba descalzo en las calles sin asfaltar de su barrio, en Tocopilla, al norte de Chile, donde ahora le van a dedicar una calle, porque según ha declarado el alcalde de la ciudad, Fernando San Román, “Alexis nunca se ha olvidado de nosotros, viene siempre que puede a ver a su familia, trae regalos para los niños en Navidad, ha arreglado varios campos para que jueguen los críos y ha conseguido la llegada de médicos para el hospital”.
Esto cambia de un día para otro y la crítica me hace más fuerte, maduro más" Alexis Sánchez
Alexis está convencido de que los goles lo han cambiado todo. “Lo tapan todo. Puedes jugar mal que dos goles lo cambian todo”, dice. Lleva cuatro y tres asistencias este curso pero está convencido de que, si ha llegado hasta aquí, es por su mentalidad: “Esto cambia de un día para otro y la crítica me hace más fuerte, maduro más. Ahora estoy en un lugar que no pienso dejar pero cada vez que termino un partido me motivo conmigo mismo y me digo: he fallado en esto o en eso otro... Aunque haya marcado dos goles, siempre pienso en lo que hice mal para poder mejorar”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.