El Juventus ignora a Llorente

Es difícil de explicar el fichaje de Fernando Llorente por el Juventus el pasado verano, después de un curso de ostracismo en el Athletic precisamente por haberse conocido con mucha antelación su compromiso con la Vecchia Signora. Lesionado el delantero montenegrino Vucinic, habitual acompañante de Tévez en el ataque del Juventus, tampoco fue anoche el turno de Fernando Llorente, que no jugó ni un solo minuto en el pinchazo del conjunto bianconero en su visita al modesto Copenhague (1-1). La sorpresa la avanzó el gol de Jorgensen tras un error en masa de la zaga juventina y solo pudo empatar Quagliarella en un tiro de primeras con la zurda desde la frontal. Conte fue poblando el equipo de atacantes: Tévez, Quagliarella, Giovinco, Vidal, todos menos Llorente, ni siquiera para la carga final, cuando los centímetros y los kilos del punta español podrían haber servido para derribar el muro danés. Por lo visto, Conte considera a Llorente su quinto delantero. No hay más.

El Bayern de Pep Guardiola pasó el rodillo ante el CSKA (3-0) con Lahm de mediocentro y una notable actuación del lateral izquierdo Alaba. El zaguero austriaco abrió el marcador con un disparo de falta a lo Gareth Bale, con ese efecto de folha seca. Y después sirvió de cuchara un magnífico servicio para el remate de Robben. Entremedias, la diana de cabeza de Mandzukic.

En el debú europeo de David Moyes en Old Trafford, Rooney se parece cada vez más a Rooney

En el debú europeo de David Moyes, el Manchester United se desató en Old Trafford ante el Bayer Leverkusen (4-2), con un gran Rooney (dos goles) acompañado por Van Persie (excelente su volea con la derecha) y otro tanto del extremo ecuatoriano Valencia. Con esa pinta cada vez más exagerada de jugador de rugby, Rooney cada vez se parece más a Rooney, al de los buenos tiempos, cuando no solo marcaba sino que participaba en casi todas las acciones de peligro.

Tampoco fallaron sus vecinos del City, muy superiores al Pilsen (0-3) con un Agüero imparable en compañía de Dzecko y Yaya Torué. Negredo se quedó en el banquillo.

Ante el PSG de Laurent Blanc, el Olympiacos de Míchel respondió en su estadio con una pésima defensa (1-4), que recibió tres goles de cabeza (dos de Thiago Motta) a centros de córner. El primer gol lo marcó Cavani. Y eso que el meta Roberto, ex del Zaragoza, paró un penalti a Ibrahimovic.