Ancelotti está en obras
El Madrid empata en el tramo final ante el Lyon (2-2) con goles de Morata y Casemiro
De sofocón veraniego a refrescante empate. Con el trazo tembloroso de los bocetos primerizos y el desbarajuste táctico que sucede a todo traspaso de pizarras, el Madrid de Ancelotti sufrió de lo lindo en Lyon en su segundo amistoso de pretemporada. Pero en el tramo final, Morata, de penalti, y Casemiro, con un cabezazo a la salida de un córner, convirtieron el zarandeo inicial en una meritoria igualada postrera.
Sin fuelle ni balón, los blancos se entretuvieron en repasar los nuevos apuntes con el partido en juego mientras el Lyon deleitaba a su hinchada con una efervescente presentación. El titubeo le pudo costar una goleada si el conjunto francés hubiera afinado con el estoque, pero no remataron la faena y fue el Madrid el que agarrado a Khedira y Casemiro protagonizó la embestida final.
O. Lyon, 2 - R. Madrid, 2
Olympique Lyon: Anthony Lopes, Miguel Lopes (min. 84,Zefane), Bisevac, Fofana (Umtiti, min. 45), Dabo, Gonalons,Malbranque (Ferri, min. 85), Lacazette (Bahlouli, min. 72), Grenier(Mvuemba, min. 72), Danic (Fekir, min. 81), Lisandro.
Real Madrid: Diego López; Carvajal (min. 75, Quini), Nacho,Pepe (Mateos, min. 61), Cheryshev, Illarramendi (Casemiro, min. 33),Di María, Ozil (Modric, min. 45), Isco (Casado, min. 60), CristianoRonaldo (Morata, min. 62), Benzema (Khedira, min. 45).
Goles: 1-0 Clement Grenier (min. 19), 2-0 Lisandro (min.60), 2-1Morata (pen.) min. 78 y 2-2 Casemiro (min. 84)
Arbitro: Tony Chaperon (FR). Mostró cartulina amarilla a Dabo(min. 50), Lacazette (min. 55), Casemiro (min. 55) y Khedira (min.67).
39.000 personas en el estadio de Gerland.
Diego López; Carvajal, Pepe, Nacho, Cherysev; Isco, Illarramendi, Di María; Cristiano, Benzema y Özil, formaron el once de Carlo Ancelotti en el primer test con nota de la pretemporada. Un 4-3-3 de manual con cuatro de los cinco campeones de Europa sub-21 y aún sin los internacionales absolutos españoles ni Marcelo sobre el tapete impecable de Gerland, de tormentoso recuerdo en la enciclopedia madridista. Con apenas una semana de rodaje, los blancos sudaron de lo lindo y evidenciaron su falta de automatismos.
En su afán por encontrar laterales de largo recorrido, el técnico italiano se entregó a Carvajal por la derecha –el jugador que más le había impresionado en sus primeros días “por su intensidad”- y repitió experimento en la izquierda con el canterano Cheryshev. Hijo del histórico delantero del Sporting de la segunda mitad de los 90, Denis se desenvuelve habitualmente como extremo en el Castilla e incluso ha llegado a jugar de nueve en sus primeras apariciones con la selección rusa dirigida por Capello, pero en el laboratorio de la pretemporada puede encontrar un hueco en la primera plantilla como teórico suplente de Marcelo. Con el lateral brasileño de vacaciones hasta el domingo y con la certeza de que Coentrão se marchará del Madrid, porque así lo ha pedido el jugador portugués por motivos personales, ese puesto parece vacante. Le sobra desparpajo, pero le falta práctica.
Aprovechó las probaturas el Lyon y por ese costado encontró la veta buena. A los 20 minutos Lacazette se coló en la parcela que descuidaban a medias Di María y el propio Cherysev y puso un centro de catálogo que encontró un remate de museo. En una maniobra tan genial como inverosímil, Grenier mandó la volea a un rincón inalcanzable para Diego López. El tanto coronó el dominio del conjunto francés, más enérgico y rodado que los blancos.
A una semana de saltar al ruedo de la Champions para disputar la segunda ronda previa de la competición frente al Grasshopper suizo, los de Remi Garde ensayaron una puesta en escena cargada de orden, concentración e intensidad en la presión, con Gonalons al frente de las maniobras. El primero en sufrir el exceso de revoluciones del Lyon fue Illarramendi. Abrumado por el escenario y tieso por los problemas de sobrecargas que arrastra desde los primeros entrenamientos, el mediocentro de Mutriku cedió su puesto a Casemiro antes de cumplirse los 35 minutos. Con similar carrocería pero con un lenguaje corporal más convincente, el brasileño ejerció de ancla con más tino y solvencia al tiempo que el rival suavizaba el sprint en busca de resuello.
A la vuelta del vestuario, Ancelotti rescató al proscrito Adán, añadió músculo con Khedira, cambió la apatía de Benzema por la sutileza de Modric y adelantó a Isco para que ejerciera de Özil, borroso desde el inicio. Llegó el segundo tanto del Lyon obra de Lisandro, pero el Madrid recompuso la figura impulsado por la zancada de Casemiro. Mejoró el armazón del equipo con doble pivote, Cherysev se animó a lucir despliegue por la banda y Morata aprovechó para reivindicarse de nuevo. Una internada del ruso provocó el penalti que dio origen al primer gol del Madrid, que poco después encontró el empate en un córner. En dos brochazos, adecentaron los blancos el marcador, pero quedó la sensación de que están en plena obra.
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