El aprendizaje de Robredo

A los 31 años, Tommy Robredo remonta 6-7, 4-6, 6-3, 6-1 y 6-1 al holandés Sijsling en segunda ronda. Este es un tenista que se ha pasado ocho eternos meses lesionado, hasta junio de 2012 tras operarse de una pierna; uno que fue el número cinco mundial y ahora lucha por volver a estar entre los 30 mejores; uno que ve la vida y la competición desde un punto de vista distinto desde que supo cuánto amaba a su deporte alejado de las pistas.

“El de antes no seré nunca”, reflexiona el español, que era un habitual de los cuartos de final de los grandes hasta que se lesionó. “Ese he sido. Tengo más años, más experiencia, una cicatriz, más bagaje y muchas ganas de ir a por todas”, continúa. “Uno, cuanto más mayor es y más torneos juega más claro tiene lo que quiere. Estar parado me ha enseñado mucho, he aprendido mucho. Este partido, hace tres años, igual no lo habría luchado tanto. Valoras más las cosas. Te da un plus. Antes de la lesión tuve un año flojo de ganas. Al estar fuera me di cuenta de que me encanta lo que hago, de que soy un privilegiado. ¿Dónde voy a estar mejor que aquí? Aquí luchando. Es un logro que lo haya podido conseguir”.

Robredo se enfrentará ahora a Gael Monfils, quien, agradecido a la grada de la central, que le alentó hasta su increíble victoria sobre el letón Gulbis (6-7, 6-4, 7-6 y 6-1), sacó su Iphone y se puso a grabar al público. Para el español será la vuelta a las centrales, a los grandes escenarios, ese sitio que por derecho propio ocupa siempre el suizo Roger Federer: 6-2, 6-1 y 6-1 al indio Devvarman.

Por otra parte, Carla Suárez remontó 3-6, 6-4 y 6-4 a la estadounidense Shelby Rogers y se clasificó para la tercera ronda. 'Tita' Torró, en cambio, se despidió de su primer Roland Garros en segunda ronda y ante la alemana Sabine Lisicki (6-4 y 6-0).