Parker y los Spurs desfiguran a unos Grizzlies decepcionantes

La primera aparición de los Grizzlies en una final de Conferencia resultó decepcionante. Los Spurs apretaron de firme y de la mano de su base francés Tony Parker marcaron territorio en el ATT Center de San Antonio con un resultado abrumador: 105-83. El equipo de Memphis, desconocido, con muchas concesiones en defensa, buscará en su experiencia de las dos anteriores rondas de los playoffs la inspiración para revertir lo sucedido en el primer partido. Ante los Clippers, perdieron los dos primeros partidos, pero ganaron los cuatro siguientes. Y en las semifinales de Conferencia, ante Oklahoma, también cayeron en el primer encuentro y ganaron los cuatro siguientes.

En San Antonio, los Grizzlies no tuvieron la menor opción. No pudieron en ningún momento ni con Parker ni con la línea exterior de los Spurs. Y además, no consiguieron explotar su mejor arma, la calidad y eficacia de sus pívots. Entre Duncan, Splitter y Diaw se encargaron de reducir los daños que pudieran causarles Marc Gasol y Zach Randolph. El jugador español, con 15 puntos, siete rebotes, dos asistencias y dos tapones, fue uno de los pocos que causó algún problema a los Spurs. Randolph se vio superado por completo en el interior de la zona, falló sus siete primeros tiros a canasta y concluyó con dos puntos y siete rebotes.

Tampoco se lucieron en ataque Duncan, Splitter y Diaw, con solo nueve puntos entre los tres. No les hizo falta. El trabajo ofensivo corrió por cuenta de Parker, primoroso, rapidísimo y eficaz, con 20 puntos y nueve asistencias. Le secundaron Leonard, con 18 puntos, Green con 16, y hasta Bonner, que aprovechó su buen tiro exterior para sumar cuatro de los 14 triples con los que concluyeron los Spurs.

Lionel Hollins, el entrenador de los Grizzlies, no acertó a montar una estrategia defensiva que frenara a Parker. Ni Conley ni Tony Allen pudieron con el base francés. Los Spurs marcaron el paso desde el primer momento y ya en el primer cuarto cerraron con 17 puntos de ventaja. Poco después sumaron un botín de 20 puntos (43-23).

La única reacción de los Grizzlies se produjo con la irrupción de Pondexter, con tres triples y 11 puntos consecutivos, y de Bayless, que con una canasta acto seguido, estrechó la diferencia a seis puntos: 62-56. Pero los Spurs respondieron con la misma moneda y con triples de Ginóbili y Bonner volvieron a tomar ventaja. Ya no dieron la menor opción a los Grizzlies.

“Simplemente, no hemos jugado bien. No se ha debido a nada específico”, resumió Collins. “Hemos corrido demasiado, hemos fallado algunas bandejas, hemos hecho malos tiros. Nuestra defensa ha sido espantosa. Y los Spurs han jugado bien”. “Nos han hecho pagar cada uno de nuestros errores defensivos, tanto si íbamos a la ayuda como si no lo hacíamos”, sentenció Marc Gasol.

“Os prometo que nadie estaba eufórico en el vestuario porque también ganábamos por 2-0 en las finales del Oeste el año pasado (contra Oklahoma) y perdimos. Es solo un partido y no significa nada. Nos queda un largo recorrido y sabemos por ejemplo que su máximo anotador, Zach Randolph, no volverá a jugar otro partido como éste”, apuntó Parker.