El Barça recupera el estatus

El pasado 13 de enero, el Barcelona quedó retratado en el Palacio de los Deportes ante el Estudiantes (88-66) en la que era su octava derrota en 17 jornadas de Liga. El día que se cerraban los billetes para la Copa del Rey de Vitoria una sombra del equipo azulgrana deambuló por el parquet madrileño en un partido en el que llegó a ir perdiendo por 34 puntos de diferencia (69-35, m. 28). Abocados a la catarsis colectiva, aquel encuentro se convirtió en un punto de inflexión para el grupo de Xavi Pascual. Funcionó el exorcismo y, desde entonces, el Barcelona ha firmado una incontestable secuencia de 13 victorias consecutivas: cinco en la Liga, cinco en la Euroliga y las tres que le permitieron alzar el título copero.

Líderes en su grupo del Top 16 y con el zurrón cargado de autoestima, los azulgrana dieron lustre a su estatus y pasearon su racha en Murcia. Ya no es excusa la ausencia de Navarro, de nuevo de baja por sus problemas físicos. Oleson y Tomic se bastaron para romper la inercia optimista del meritorio conjunto de Óscar Quintana, que sumaba tres victorias consecutivas ante Valencia, Blusens y Gran Canaria. 16 puntos y cuatro asistencias del escolta de Alaska y un doble-doble del pívot (19 puntos y 12 rebotes) refrendaron la superioridad de un equipo que, seis semanas después de tocar fondo, ha encontrado la velocidad de crucero competitiva que se le suponía.

Tomic (19 puntos y 12 rebotes) y Oleson se bastaron para superar al conjunto de Óscar Quintana

Vitoria fue el epicentro de la mutación. La pica en Flandes que rearmó a los azulgrana al tiempo que destapaba las dudas de su eterno rival. El Barça ha vuelto, pero el Madrid no cede un ápice a pesar de aquel borrón. Un pulso de quilates a distancia a la espera de otros mano a mano, condenados como parecen a disputarse entre sí los títulos.

Cuando comenzaba a asomar la fatiga, el calendario ha otorgado un respiro a los de Laso que estarán casi un mes sin moverse de casa hasta su próximo viaje a Kaunas. Ayer visitaron a sus vecinos de la zona sur y se merendaron al Fuenlabrada con sencillez. Los de Trifón Poch, que la semana pasada rozaron la gesta en el Palau donde cayeron sobre la bocina, apenas aguantaron un asalto ante los blancos. Un parcial de 13-29 en el segundo acto desarmó la enclenque resistencia fuenlabreña que fio su suerte, única y exclusivamente, a la inspiración de Feldeine, anoche poco inspirado (con siete de 17 en tiros de campo).

Alos 25 minutos de partido un triple desde ocho metros de Llull puso en marcha el rodillo blanco (40-55). El menorquín, ofuscado en las últimas citas, encontró el rigor, la mesura y la puntería extraviadas y movió con criterio a su equipo. Con 23 puntos (cuatro de seis en triples) en 26 minutos de juego lideró otro festín anotador del Madrid, de nuevo en la frontera de los 90 puntos como marca su media en la Liga (65-88). Mirotic, Sergio Rodríguez y Rudy Fernández mantuvieron las cuotas intactas. Si en el Top 16 los blancos han bajado su media hasta los 74,9 puntos, en ACB siguen como un tiro. A estas alturas del campeonato han anotado 239 puntos más que el Barcelona y además lideran las estadísticas de mates, triples y valoración.

Llull recuperó la mesura y la puntería y, con 23 puntos, lideró a los de Laso. Felipe superó los 12.000 minutos en Liga

El partido sirvió además para que Felipe Reyes se diera un homenaje enciclopédico. Ejemplo de constancia, el capitán madridista alcanzó una de las fronteras históricas de la ACB: los 12.000 minutos. Una clasificación que lidera Joan Creus (20.211) y en la que solo Juan Carlos Navarro (13.129) comparte honores con Reyes entre los jugadores en activo. No ha figurado en el quinteto de Laso en ninguna de las 21 jornadas que ha disputado este curso, dato accesorio atendiendo a su condición de imprescindible por galones y productividad.

En la lucha por los puestos de playoff, Estudiantes, Gran Canaria y Valencia pincharon a domicilio, los dos últimos ante rivales directos de la zona noble de la tabla. El Caja Laboral venció a los de Pedro Martínez, con Lampe y Nocioni como estiletes (18 y 16 puntos respectivamente) volvió al carril tras algún tiro al aire en las últimas semanas y mantiene con solvencia la segunda plaza en la clasificación. Los de Tabak, que han descabalgado en el tramo decisivo de la Euroliga con cuatro derrotas consecutivas, se mantienen firmes en la Liga y ante el Gran Canaria sumaron su 13ª victoria en las 14 jornadas que ha dirigido el croata desde que llegara al banquillo vitoriano el 19 de noviembre. Mientras el CAI tumbaba al Valencia y alcanzaba la quinta plaza que refrenda el meritorio recorrido de los de José Luis Abós.

En la lucha por la supervivencia, Canarias y Cajasol pusieron en valor su condición de local mientras el Manresa volvió a caer, en esta ocasión ante el Joventut, a pesar de los 34 puntos de Troy DeVries.