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Pepe, el blindaje de Mourinho

El técnico madridista recupera a su mano derecha en un sistema defensivo que considera clave en el cruce

Mourinho, antes de comparecer ante los medios.Foto: atlas | Vídeo: A. Kudacki
D. TORRES

José Mourinho lleva semanas preparando este día. Ponderando, imaginando, calculando cuál es la mejor manera de organizar a los seis hombres que formará entre el centro del campo y la defensa para desactivar el ataque del Manchester. Solo un hecho inesperado, el formidable partido de Varane en el clásico de Copa, el 30 de enero, le ha llevado a considerar nuevas posibilidades. Dicen en Valdebebas que lo primero que hizo el técnico, tras comprobar la repercusión que había tenido la actuación del francés, fue mandar a Pepe a acelerar su recuperación. El 1 de febrero, exactamente un mes después de su operación de tobillo, Pepe salió a correr por primera vez. El lunes 4 sus compañeros le vieron, asombrados, incorporarse al entrenamiento con balón. Estaba lento, fuera de forma, apresurado, esforzándose por romper los límites que le ponía el cuerpo. Con 29 años estos límites son más visibles y la puesta a punto se alarga. Pero Mourinho le necesitaba. Le quería para hoy porque para el mánager era urgente que su brazo derecho custodiara los accesos a la portería de Diego López.

Asegurada la presencia de Pepe en el centro de la zaga, y comprobado en cada entrenamiento el excelente nivel de Varane, ahora la plantilla se pregunta algunas cosas. ¿Romperá Mourinho la pareja Pepe-Ramos para desplegar el dúo Pepe-Varane? ¿Trasladará a Ramos a la banda prescindiendo de su fiel Arbeloa? ¿Se atreverá a dejar a Ramos, el capitán, y su mejor defensa, en el banquillo? ¿Se meterá en otro lío? La mayoría se inclina por apostar a que Ramos jugará, pero no tiene claro en qué puesto. La mayoría del vestuario también pronostica un partido de desgaste, de rigor táctico, de más precaución que atrevimiento. Si el Manchester sale a tener el balón, cosa rara, mejor.

El formidable partido de Varane en el clásico de Copa lleva a Mou a plantearse nuevas posibilidades

Hay tres cuestiones que concentran la atención de Mourinho por encima de todo lo demás, cuando se trata de preparar partidos importantes. Primero, la lealtad de sus hombres. Segundo, el análisis del juego ofensivo del adversario con el fin de explicar a su equipo cómo neutralizarlo. Tercero, la creación de señuelos para que el rival se adentre en terreno del Madrid con el balón controlado, propiciando el error, el robo y el contragolpe. En resumen: que en el plan del mánager el ataque es una consecuencia de la defensa. Defienden todos para que algunos intenten hacer goles. Lo básico es no encajarlos.

Florentino Pérez se desencantó con Mourinho el día que el Madrid quedó eliminado de la Champions ante el Bayern (2-1). El empate (2-2) contra el Dortmund en la pasada liguilla no hizo más que ahondar en una apreciación arraigada en el palco del Bernabéu: después de dos años y medio de labor, el mánager no consiguió que el Madrid, con el presupuesto más elevado de la historia, consiga imponerse con un mínimo de claridad en la Champions. De los 10 encuentros europeos que el equipo ha disputado desde 2010 contra adversarios que aspiran al título (Barça, Milan, Bayern Múnich, Borussia y Manchester City), ha ganado tres, perdido tres y empatado cuatro.

Hasta ahora, los planteamientos de Mourinho, centrados en la organización sin el balón, no han dado frutos en los momentos culminantes de la Champions. En los últimos tres años el único precedente de una eliminatoria a doble vuelta con un candidato al título, jugando la ida en casa, es la semifinal contra el Barça en 2011. Ese día el Madrid salió a jugar con Pepe, Khedira y Alonso en el medio campo. El Barça ganó por 0-2.

Los planteamientos de Mourinho, centrados en la organización sin el balón, no han dado frutos en los momentos culminantes de la Champions.

Ante el Manchester, más que nunca, el trivote parece una opción innecesaria. Por lo demás, Mourinho prepara el enfrentamiento sin cambiar de idea. A la organización defensiva como prioridad ha sumado la selección de los futbolistas más leales a su persona, incluso por encima de criterios de calidad.

La postergación de Marcelo en lugar de Coentrão en el lateral izquierdo es el caso más evidente. Marcelo se reincorporó con sobrepeso tras las Navidades, después de dos meses en reposo para curar la operación de un pie. Los médicos aclararon al mánager que el jugador se cuidaba pero que su metabolismo no le ayudaba, y que no ganaría condiciones hasta que no jugase. Varios miembros de la plantilla opinan que Mourinho pudo dar minutos progresivamente a Marcelo en varios partidos resueltos (dos veces en Mestalla, contra el Getafe y el Sevilla) para que recuperara la forma pero, sin embargo, le mantuvo apartado. En el vestuario se recuerda que una de las causas de la eliminación ante el Bayern el año pasado fue la suplencia de Marcelo en la ida en Múnich.

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Sobre la firma

D. TORRES
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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