Vilanova busca en el armario

El Barcelona recibe al Getafe a las 12.00, una hora tan poco habitual que en el Camp Nou hay que remitirse al 25 de diciembre de 1965 en un partido de Liga contra el Las Palmas para buscar un precedente. Se llenará el estadio de niños, los capitanes festejarán el nuevo año chino antes de empezar —el partido se emitirá por varias cadenas asiáticas— y por la inusual exigencia horaria el equipo azulgrana quedó concentrado ayer en un hotel de la ciudad, un cambio sustancial en los hábitos del grupo. El cambio de hora afecta también a la previsión del perfil del aficionado asistente: se anuncia una entrada excelente por la presencia de mucha gente joven en las gradas.

También se espera que Tito Vilanova, desde Nueva York, dé instrucciones para que Thiago sustituya a Xavi —lesionado—, Villa aparezca en la alineación y Alexis tenga opciones de abrazar el gol. Necesita el equipo cambiar de chaqueta, tirar del fondo de armario, para que no se apolille el camerino. El Guaje reclama minutos y el chileno necesita ganar confianza. Las bajas que anuncia el Getafe, hasta seis titulares, dan para algunas concesiones en la formación después de que el once titular se haya desgastado en Mestalla y el Bernabéu. Tito tiene donde elegir.

Villa demostró en Catar contra Uruguay, en los minutos que jugó con La Roja, que está listo para competir en la Liga. El asturiano siempre dijo que tendría paciencia, pero todo en la vida tiene un límite. La sensación es que hoy le toca. El goleador es el jugador número 13 de la plantilla por presencia en el campo: con 1.139 minutos, ha jugado más que Puyol, pero menos que Alexis, y mucho menos que Iniesta, Pedro y Messi, los titulares en el ataque del equipo. El Guaje lleva 15 partidos en la Liga, ha rematado 14 veces, 10 entre los tres palos, y ha marcado cinco goles. El tema de Alexis es más complejo, porque no la enchufa pese a las múltiples ocasiones, seco como está en 14 partidos después de 14 remates, nueve a portería. Se da por hecho que desde los Estados Unidos, el jefe Vilanova está al tanto y sabe de las necesidades del colectivo.

Villa demostró en Catar contra Uruguay, en los minutos que jugó con La Roja, que está listo para competir en la Liga

“No hay caso Villa. Estamos encantados. Viene de un proceso difícil y cada vez participará más; ya entrará en el equipo”, aseguró Jordi Roura antes de admitir que hay jugadores que necesitan minutos. “Lo valoraremos con Tito”, dijo, consciente de que algunos futbolistas llegan castigados por los distintos amistosos con sus respectivas selecciones —Alba, Fábregas y Busquets, por ejemplo, jugaron 90 minutos en Doha— y de que alternativas como Song apenas acumulan 867 minutos en Liga.

Roura insinuó que el cuerpo técnico es consciente de ello. No habla sino por boca de Vilanova, siempre, porque el contacto es permanente. por mucho que esté en Nueva York, donde recibe tratamiento médico y la próxima semana será visitado por el director deportivo, Andoni Zubizarreta, y posteriormente por el presidente, Sandro Rosell. “Siempre hemos estado en contacto permanente con él gracias a las nuevas tecnologías. Está más activo que nunca, se encuentra muy bien y está animado”, afirmó Roura. “Las diferencias son mínimas aunque él no esté aquí. No es lo mismo, pero tenemos un sistema de cámaras que le permite ver incluso los entrenamientos”. Desde la visita a Valladolid, el 22 de diciembre, siempre fue así y los jugadores lo tienen asumido, los que más juegan y los que menos.

Ante el Getafe, un equipo al que se respeta “porque siempre está bien armado”, juega el Barça a la hora del vermut, con el entrenador en Nueva York y miles de niños en las gradas.