Benítez revaloriza a Torres

Como en el Liverpool, pero con la camiseta del Chelsea. Fernando Torres ha recuperado el gol, como expresó ayer en el triunfo de los blues en la semifinal del Mundial de Clubes contra el Monterrey (1-3), mexicano. El del español fue el segundo tanto, un disparo a puerta que el defensa Pérez ayudó a convertir en gol por la escuadra. Es la quinta red de Torres en los seis partidos del Chelsea dirigidos por Rafa Benítez, la quinta en sus tres últimos duelos; hizo un doblete en la Champions ante el Nordsjaelland y otro en la Premier, frente al Sunderland.

Por primera vez desde que el Abramovich le fichó en enero del 2011 por 58,8 millones, el delantero marca en tres partidos consecutivos. Una eclosión que coincide con la casi perenne de Juan Mata, que ya firmó un gran año el curso anterior y que ahora parece haberle cogido de nuevo el hilo a la competición; marcó también ante el Monterrey y sale a tanto por partido en los últimos cuatro compromisos. Un rendimiento inmediato, el de ambos, que se le atribuye a Benítez.

El recibimiento del técnico hace tres semanas en Stamford Bridge, sin embargo, se rodeó de abucheos y pancartas que dejaban claro que no olvidan de su pasado red. Benítez empezó torcida la aventura puesto que en los tres primeros partidos acumuló dos empates a cero y una derrota. Pero entonces comenzó la racha de resultados y goles españoles. Torres volvió al marcador, algo que no ocurría desde el 7 de noviembre, en la goleada europea al Nordsjaelland. Un triunfo, en cualquier caso, que de nada sirvió porque el equipo, actual campeón del torneo, ha sido el primero de la historia de la Champions que es apeado al año siguiente en la liguilla. “Hasta cuando gana, Rafa pierde”, señalaron los tabloides británicos. Pero llegó la Premier y el laurel ante el Sunderland y ahora el Mundial de Clubes, donde disputará la final frente al Corinthians brasileño (domingo a las 11.30 en Telecinco).

“Benítez trabaja muy duro y lo van a aceptar como a uno de ellos pronto, no solo por los resultados, sino por la actitud que se va a ver”, explicó Torres tras el partido. Por lo pronto, el entrenador ha conseguido que El Niño recupere la confianza. Y que Mata, cómodo cuando eran Villas-Boas o Di Matteo los que ordenaban, la mantenga: ya ha marcado en Liga tantos goles, seis, como en toda la campaña pasada.

Aparte de crear el ambiente propicio para que Torres se revalorice, el cambio de esquema de Benítez ha ido más allá. Ayer, jugó de mediocentro el central David Luiz. Forzado por la grave lesión de Oriol Romeu —que era su prioridad por delante de Mikel y Ramires—, parece que el técnico ha dado donde debía. De un flojo central brasileño emergió un sólido centrocampista. Y, con el partido sentenciado, el técnico reservó a los tres. Mata, Torres y Luiz vieron desde el banquillo el honor de los mexicanos. No pasó de un gol incómodo, por lo que los españoles jugarán la final. De la mano, eso sí, de Benítez.