“El Tigre siempre quiere más”

“Es un día histórico para él, pero lo conozco bien y siempre quiere más”. Diego Simeone ya había dirigido a Radamel Falcao en River Plate, el trampolín que le catapultó a Europa. Pudo acabar entonces en el Deportivo, que lo tuvo fichado hace ya casi cinco años y lo perdió por un quítame allá esas comisiones. El colombiano acabó en Oporto, ahora es el goleador de moda, el tipo que hace feliz al Calderón. “Pues en el vestuario estaba tan tranquilo”, detalló su compañero Koke. “Radamel se merece todo lo bueno que le pase, es una gran persona. A nivel profesional nunca había jugado con un compañero que metiese cinco goles en un partido, pero para nosotros es normal verle a ese nivel porque es el mejor nueve del mundo”.

El primer jugador del Atlético en marcar cinco goles en Liga saboreó su gesta durante largo tiempo en la intimidad de la caseta. Hora y cuarto después del final del partido se aprestó a compartir sus sentimientos con los periodistas, el balón firmado por sus compañeros bajo el brazo. “Antes del partido pensé en Calero [guardameta colombiano recientemente fallecido]”, confesó antes de matizar que nunca había logrado cinco goles en tan corto espacio de tiempo. “Al Villarreal le marqué cuatro en competición europea cuando estaba en el Oporto”.

No sé bien si lo que hemos visto se volverá a repetir” Diego Simeone

La noche que Messi hizo historia, Falcao escribió también la suya. “Vine para eso al Atlético. Le felicito —apuntó sobre el argentino—, pero yo hago mi propia carrera. Ha sido una gran noche como las de Bucarest y Mónaco. Lo que intentó es disfrutar”. Lo hace, asegura, ajeno a las plusmarcas que supera. Por ejemplo la de Forlán en el Atlético como máximo realizador en un año natural. “No me fijo en ello, intento superarme a mí mismo”.

“Cuando cometes errores ante un delantero así, uff…”, atinó a suspirar el meta Aranzubia al pie del autocar del Deportivo. “Posiblemente sea el mejor delantero del mundo”, recalcó el técnico valenciano, que tampoco quiso minusvalorar la hazaña porque ante el colombiano estuvieran Roderick e Insua, dos centrales sin apenas bagaje en Primera. “Hubiera sido lo mismo ante cualquier defensa”, zanjó.

“No sé bien si lo que hemos visto se volverá a repetir”, reflexionó Simeone, que con su goleador bajo los focos quiso dejar palabras de afecto para sus otros dos delanteros. “A Diego Costa lo necesitamos para poder ser competitivos. Es un futbolista intratable porque transmite miedo a sus rivales. Y Adrián cada vez está mejor”. E insistió como si avanzara que el arsenal está cargado: “Cada vez está mejor”. Pero toda esa fe se transforma en cautela cuando le preguntan por las opciones de su equipo para competir por la Liga. Ahí Simeone rescató a un clásico del Manzanares, a Luis Aragonés. “Esperemos a que queden cinco o seis jornadas para el final del campeonato”, emplazó.