Alonso: “Estoy más relajado y centrado”

El 10 de junio de 2007, Robert Kubica sufrió en Montreal uno de los accidentes más espeluznantes que la fórmula 1 ha presenciado en los últimos tiempos, al empotrarse con su BMW contra el muro de protección a más de 200 kilómetros por hora. La desgarradora escena se saldó finalmente en una pierna rota y varias magulladuras, unas lesiones que impidieron que el polaco se alistara en la siguiente prueba, una semana después, en Indianápolis. Como recambio, la escudería alemana decidió poner al volante de su monoplaza a Sebastian Vettel, su tercer piloto, que terminó el octavo y se convirtió en el corredor más joven de la historia en puntuar (19 años y 349 días). Pues bien, aquel rubiales con cara de Calculín llega este fin de semana al reluciente circuito de Austin con dos títulos mundiales con Red Bull en el zurrón (2010 y 2011), y la posibilidad de conseguir el tercero en la carrera que le convertirá en centenario. El único capaz de impedirlo es Fernando Alonso, bicampeón como él (con Renault, en 2005 y 2006), que circula 10 puntos por detrás del alemán a falta de dos paradas para que el Mundial baje el telón en Brasil. Vettel vuelve al país en el que debutó y se llevará la corona si termina en el podio y el español no lo hace entre los diez primeros, o si acumula 15 puntos más que él.

El Mundial está al rojo vivo y Alonso emplea todo lo que tiene a su alcance para tratar de trasladar la presión a su rival. Para conseguirlo ha decidido mostrarse en público tan sereno como pueda, confiado al máximo y muy concentrado, convencido de que las mil batallas que ha librado antes jugarán a su favor. “Esta vez estoy mucho más relajado que las anteriores veces que me he jugado el título a final de curso. En 2006, en Brasil y contra Michael, no era nada fácil mantener la concentración porque todo estaba muy justo”, detalló ayer el asturiano. “Al año siguiente, en 2007, tampoco fue nada fácil porque peleaba con Lewis y con Kimi y había mucho estrés. En 2010 fue todo mucho más tranquilo, aunque el resultado final no acompañó. De todas formas lo preparamos muy bien y me sentí mucho más maduro”, recordó el ovetense. “Confío plenamente en mis ingenieros y en mí mismo, y sé que si hacemos nuestro trabajo perfectamente tendremos opciones. Si cometemos errores, no. Mi único objetivo es preparar bien la jornada de mañana y la cronometrada, sumar tantos puntos como sea posible y llegar a Brasil con opciones”, zanjó el empleado más ilustre de la marca de il cavallino rampante, que no tiene otra opción que esperar el error de su oponente.

La velocidad pura de un coche de F-1 se mide en condiciones de cronometrada, esto es, cuando rueda prácticamente descargado de combustible y está calibrado para dar una vuelta al máximo. En este escenario, el Red Bull es innegablemente más competitivo que el Ferrari, que, sin embargo, se revitaliza durante los domingos. El RB8 ha logrado hasta ahora 7 poles (cinco de Vettel y dos de Webber) y ha monopolizado la primera línea en tres ocasiones, mientras que el F2012 suma dos, ambas de Alonso.

El RB8 ha logrado hasta ahora 7 poles (cinco de Vettel y dos de Webber), mientras que el F2012 suma dos, ambas de Fernando Alonso

Hasta hace dos semanas, cuando Baby Schumi remontó 20 puestos en Abu Dabi tras salir el penúltimo y cruzar la meta el tercero, Vettel había perdido dos puntos en relación a los que le hubieran correspondido según sus posiciones al arrancar, a la vez que su rival había ganado 67. En cuanto a las posiciones, el chico de Heppenheim se había quedado igual y el asturiano había recuperado 28. Después de Abu Dabi, el balance de Vettel queda con 13 puntos y 20 posiciones a su favor, mientras que el del ovetense es de 77 puntos ganados y 32 posiciones recuperadas. Esta comparación, en cualquier caso, está absolutamente condicionada porque el actual campeón, al salir siempre en los primeros puestos, tiene mucho más a perder que su oponente. Más allá de la estadística, hay otro factor a tener muy en cuenta y es el discurso que mantienen los dos pilotos con sus estructuras: Vettel aprovecha la mínima ocasión para agradecer a Red Bull haberle proporcionado el prototipo que conduce, a la vez que Ferrari no para de darle las gracias a Alonso por competir como lo hace.