“Higuaín jugará de lateral izquierdo”

El Real Madrid nunca tuvo un entrenador tan exigente con los medios de comunicación como José Mourinho. El mánager lleva un año lamentando la ausencia de una adhesión unánime a las campañas propagandísticas que él mismo alienta desde el club, generalmente para beneficio de su propia reputación. Mourinho reclama más colaboración que ninguno de sus predecesores, pero pocos entrenadores en la historia del Madrid han tratado con más desdén a las televisiones, radios y periódicos que regularmente acuden a Valdebebas a informar a los aficionados sobre la actualidad del equipo. Cuando esta tarde le preguntaron si mañana ante el Mallorca insistiría con Essien en el lateral izquierdo, respondió que en ese puesto pondría a Higuaín, que es delantero centro y que jamás ha ocupado un puesto más retrasado que la segunda punta. Solo Mourinho sabe si mintió deliberadamente, si ironizó, o si habló con sinceridad de una medida que constituiría una extravagancia.

Mourinho se pronunció con pesar, como si ejerciera una función que le desagrada profundamente, en un tono desafiante. “Mañana, el lateral izquierdo será Higuaín”, dijo, taciturno. “Y Essien, o juega en el centro del campo o no juega. Porque Higuaín está rápido, fuerte, centra bien, con la pierna izquierda, marca goles con la zurda centrando desde la banda… Así es que mañana, lateral Higuaín”.

Essien, o juega en el centro del campo o no juega. Porque Higuaín está rápido, centra bien con la pierna izquierda, marca goles con la zurda centrando desde la banda…" José Mourinho, entrenador del Madrid

La decisión sería extraña, pero no nueva. Mourinho ya probó en el lateral derecho con el delantero Eto'o cuando dirigía al Inter y se midió al Barcelona en la sefiminal europea de 2009. La diferencia, en cualquier caso, es que el punta camerunés no jugó a pierna a cambiada.

La epidemia de lesiones que afecta a la defensa y al centro del campo del Madrid ha obligado a Mourinho a tomar decisiones creativas en los últimos partidos. Las bajas de Arbeloa, Marcelo, Coentrão y Khedira hicieron que el entrenador jugara con tres mediapuntas o que alineara a Essien, un mediocentro defensivo diestro, en la banda izquierda. El ghanés funcionó con solvencia frente al Celta, pero se vio superado ante el Borussia en Dortmund, en la Champions. La inexperiencia de Essien como lateral ha desencadenado críticas desde diversos sectores. Entre los jugadores madridistas no faltan quienes probarían con jugadores como Nacho Fernández, el defensa del Castilla, en el lateral izquierdo. De este modo, argumentan que no se rompería la pareja Ramos-Pepe, fuente de estabilidad para todo el equipo.

“Nacho es un problema porque en el Castilla es central y en el primer equipo es lateral derecho”, explicó Mourinho, cuando le preguntaron por el canterano. Con este argumento, el mánager trasladó la responsabilidad a Alberto Toril, el entrenador del Castilla, por no utilizar a Nacho en una posición acorde a las necesidades del primer equipo. “Esto es un problema”, prosiguió Mourinho, “porque normalmente la formación de los jugadores no debería tener contradicciones y en estos momentos existe una contradicción porque Nacho en el primer equipo no juega como central y en el equipo en el que juega los fines de semana [el Castilla] normalmente actúa como central. Pasa con los hijos. Cuando la educación tiene contradicciones es un proceso más complicado. Y en este momento existen contradicciones en el último tramo de la educación deportiva de Nacho”.

Nacho es un problema porque en el Castilla es central y en el primer equipo es lateral derecho" José Mourinho

Mourinho confirmó que Ramos jugará a pesar de tener problemas físicos. “Sergio Ramos está bien”, dijo. “Él tiene un problema físico y no se ha preparado en los últimos días. Pero está pensando en el equipo. Se está poniendo a disposición del equipo porque sabe que tenemos problemas atrás. Y eso es… No de agradecer porque es un profesional del fútbol, pero sí de destacar”.

Interrogado por Modric, el último gran fichaje del Madrid, que por contratarle pagó al Tottenham una cantidad que ronda los 40 millones de euros, el mánager puso cara de funeral. “Modric”, ponderó, “está siguiendo una evolución normal. En mi opinión está más integrado. Y bien… Nada… Puede jugar o no mañana. Pero estoy contento con su progresión natural. Poco a poco, tranquilo. El chico hace su trabajo y yo confío cada vez más en él de cara al futuro. Jugando más o menos. En el banquillo o empezando. 20 minutos o 90. Está cada vez mejor”.

Últimamente a Mourinho le desagrada que le hagan cualquier pregunta sobre Casillas. Su última aparición pública no fue una excepción cuando le pidieron que valorase el premio Príncipe de Asturias que había recibido el capitán madridista en compañía de Xavi Hernández, capitán del Barça, el viernes en Oviedo. “Ya lo he valorado hace unos meses cuando ellos han ganado el premio”, zanjó. “No tengo por qué valorarlo otra vez”.

Iker Casillas, en calidad de capitán de la selección española, votará a Vicente del Bosque para el premio a mejor entrenador del año y a Sergio Ramos para el Balón de Oro de la próxima gala de la FIFA. Estas elecciones mantienen especialmente tenso a Mourinho, que se mostró nervioso cuando alguien le invitó a que opinara sobre los votos de su jugador. “¿Qué tengo que ver yo con esto?”, se exasperó. “¡Qué tengo que ver yo con esto! ¡A quién vota él… [Casillas]! ¡Qué tengo que ver yo con esto!”.