“Hay poquitos mejores que Felipe”

Ferrari abandonó Monza con un balance tremendamente positivo. El tercer puesto de Fernando Alonso en el Gran Premio de San Marino y el abandono de Sebastian Vettel, su inmediato perseguidor hasta entonces en el Campeonato del Mundo de F-1, permitió que el español recuperase parte del margen de ventaja al frente de la clasificación que había perdido el domingo anterior en el de Bélgica al ser embestido por Romain Grosjean. Sin embargo, La Scuderia celebró tanto su podio como la cuarta posición de Felipe Massa, por más que el brasileño perdiera una respecto a la que ocupaba en la parrilla en el arranque y Alonso escalara siete (salió el décimo).

Este subidón, hasta cierto punto sorprendente, refleja el aprecio que los gerifaltes de la marca de Maranello le tienen a Massa a pesar de haberse convertido en un activo difícil de justificar. El peso de lucir el logotipo de Il Cavallino Rampante está aplastando los pobrísimos resultados de este piloto de 31 años que el 2 de noviembre de 2008 cruzó la meta de Interlagos convencido de que lo hacía como campeón mundial hasta que, segundos más tarde, Lewis Hamilton le arrebató la gloria. En su séptimo curso como titular de los bólidos rojos, acumula sus peores registros desde que en 2006 sustituyera a su compatriota Rubens Barrichello como escudero de Michael Schumacher, un bagaje que va camino de suponer su punto final con Ferrari.

El paulista ocupa el décimo puesto en la tabla, con 47 puntos, todo un contraste con los 179 de Alonso, el líder. Es su peor clasificación a estas alturas del campeonato (tras 13 carreras) desde que se viste de rojo. Solo una vez, en 2009, el año que sufrió un accidente en Hungría que le dejó fuera de combate desde la novena cita del calendario, sumó menos puntos (22), aunque entonces el sistema era el antiguo, aquel que otorgaba 10 al vencedor en vez de los 25 actuales. De tratarse del nuevo, Massa habría sumado 55 en esas nueve pruebas, ocho más de los que posee.

El equipo y yo le necesitamos tanto para luchar por el título de constructores como por el de pilotos" Fernando Alonso

Sin ningún podio en su casillero, con unas estadísticas tan paupérrimas y un contrato que expira este año, el baile de nombres como posibles sustitutos es frenético, desde Sergio Checo Pérez hasta cualquiera de los dos integrantes de Force India, Paul di Resta o Nico Hulkenberg, pasando incluso por Heikki Kovalainen. “Felipe ha tenido un par de temporadas complicadas y es verdad que el equipo y yo le necesitamos tanto para luchar por el título de constructores como por el de pilotos. No es lo mismo encontrarte en una curva a tu compañero de equipo que a uno de tus máximos rivales”, reflexionaba ayer Fernando Alonso.

“Pero, cuando leo algunos de los nombres que han salido, me entra la risa. Si me pongo a repasar qué pilotos de la parrilla o de las categorías inferiores son mejores que él, me vienen a la mente muy poquitos. Será una decisión del equipo, pero yo, por mi parte, sí que pediría que, si deciden sustituirle, contraten a uno mejor que él y eso no es fácil”, concluyó el asturiano. Por un lado, Alonso desearía contar con más ayuda de la que le ofrece hoy por hoy su actual vecino, pero, por otro, está encantado de poder trabajar sin nadie que le haga sombra.