Wallace, el protagonista inesperado

CJ Wallace (29 años) jugó su mejor partido vestido de azulgrana el día que el equipo más lo necesitaba. El Barcelona se presentó en el cuarto encuentro de la final de la ACB con la presión de que, si el Real Madrid ganaba, los culés se despedirían del título. Y con la paliza del lunes (85-59) aun flotando en el ambiente de un Palacio de los Deportes hostil y lleno hasta la bandera.

El ala-pívot estadounidense con pasaporte congoleño fue el invitado inesperado. El Real Madrid se centró en defender a Navarro y se olvidó de que Wallace también sabe tirar triples. El jugador del Barcelona sorprendió a propios y ajenos: se marcó su mejor partido de toda la temporada, con récord anotador y de valoración incluidos. El ex del Gran Canaria metió 16 puntos, 14 de ellos solo en el segundo cuarto. Después se centró en defender y en poner tres tapones que frustraron ataques de los madridistas Sergio Rodríguez, Velickovic y Singler.

Llama la atención que solo en los 24 minutos que estuvo sobre la cancha –también récord personal este año- consiguiera más puntos que en los tres encuentros anteriores. Desde que arrancó la final en el Palau, Wallace solo había sumado 14 puntos a su cuenta particular. Los mismos que logró en el segundo cuarto. El norteamericano acabó con una valoración de 20, marca que no había conseguido superar en ningún partido liguero. Solo en la cuarta jornada contra el Blusens Monbus la igualó.

Una de las claves que inclinó la balanza hacia el lado azulgrana fue la falta de acierto de Jaycee Carroll. El madridista se salió en el encuentro del lunes, pero el miércoles le abandonó la inspiración. Inspiración que fue a parar al que fuera su compañero en el Gran Canaria. Wallace metió tres triples en sus cuatro intentos, un 75% de acierto, frente al 33% que promedia esta temporada. El equipo de Pablo Laso se vio impotente ante el acierto del Barcelona desde más allá de la línea de 6,75 metros: Wallace, Marcelinho Huertas y Lorbek fusilaban a su antojo. Entre los tres, anotaron 8 de 15 en triples casi sin oposición blanca.

En los tres partidos anteriores solo anotó 14 puntos, los mismos que en el segundo cuarto contra el Madrid

Antes de que empezara el cuarto encuentro de la serie, Wallace se mostraba optimista. “Estamos preparados, concentrados y sabemos que podemos ganar. Todo el mundo tiene buenas sensaciones”, comentó. Ese ánimo chocaba con su escaso rendimiento en los anteriores partidos. Si bien es cierto que en la derrota del Palacio fue uno de los pocos que dio la cara -13 puntos-, en los dos primeros choques su actuación dejó mucho que desear. Valoraciones de -4 y -1, y apenas un punto en los 26 minutos que jugó, no despertaban mucha confianza en este jugador.

El primer cuarto del partido del miércoles parecía indicar que Wallace seguía por el mismo camino. Acumulaba una valoración de -1. A partir de ese momento, despertó y volvió a ser ese jugador determinante que en el Gran Canaria se disputaba los galones de líder con Carroll.