“Más desgaste mental que físico”

Hay jugadores que saben darle normalidad incluso a las situaciones más incomodas y surrealistas. Quizás sea por el brazalete de capitán. O por la experiencia. O porque llevan la decepción por dentro. Anoche Iker Casillas se cruzó en zona mixta con Neuer, el portero del Bayern. Ironía de la suerte, se tuvo que apartar en los estrechos pasillos del Bernabéu para que su rival pudiera pasar, maleta en mano. Camino del aeropuerto, camino de Múnich y de la final. “Suerte crack”, le dijo Iker Casillas poniéndole una mano en la espalda. Como si hubiese perdido una partida al mus en vez del partido que daba acceso a la final de la Copa de Europa. Casillas es así. “Si Chelsea y Bayern están en la final es que algo habrán hecho. Han demostrado su calidad, la del bloque y han tenido una pizca más de suerte”, reflexionó el capitán.

Confesó que en el vestuario habían dado las gracias a Cristiano y Kaká. “Por la valentía que tuvieron en asumir la responsabilidad de lanzar los primeros”, comentó. Poco después apareció Lahm en zona mixta y, para más ironía, enseñó a las teles la camiseta que llevaba debajo del chándal. Ponía: “Final de Múnich” y la fecha. “Pensábamos que íbamos a ir a la final…”, resumió Pepe, triste como nunca. Él, que siempre se pasea con su sonrisa. “Es una pena por todo lo que hemos trabajado este año”, continuó el central, que ayer firmó una de sus mejores actuaciones con la camiseta del Madrid. “Es una pena, sí. Pero hemos hecho lo que hemos podido”, subrayó Marcelo. En sala de prensa, Mourinho dijo que haber jugado un partido tan importante el sábado —el clásico en el Camp Nou— había perjudicado a su equipo. “No creo eso. El clásico no nos perjudicó”, aseguró el lateral.

Lograr lo que logramos en el Bernabéu es algo grandioso. Jupp Heynckes

Confesó Marcelo que Mourinho, en el vestuario, les dijo que habían sido unos guerreros, que se habían dejado la piel en el campo y que por eso tenían que salir con la cabeza bien alta. “Hemos luchado y peleado, más no podíamos hacer”, dijo el brasileño. ¿Ganar la Liga puede compensar esta decepción?, le preguntaron. “Es que no llegar a la final de la Champions no es una decepción, menos con la temporada que hemos hecho este año”.

Casillas tampoco habló de cansancio cuando le preguntaron si el clásico les había podido afectar. “El partido de hoy más que físico ha sido de desgaste emocional. Mirabas el reloj, veías que el tiempo pasaba… y el desgaste de cabeza es grande”, analizó. “Es un momento difícil para todos, es duro asimilarlo, pero el domingo hay que jugar contra el Sevilla y conseguir la Liga. Se lo debemos a esta afición”, prosiguió.

No llegar a la final no es una decepción, menos con la temporada que hemos hecho. Marcelo

Igual que Pepe, el capitán del Madrid reconoció que el equipo creía tener el pase a la final. “Parecía que teníamos el partido controlado, hasta que apareció Robben”. Y hasta que llegó la tanda de penaltis. “Si Sergio no falla, Schweinsteiger llega más nervioso a su turno. Pero es que no sirve de nada ahora ponerse a analizar estas cosas”. ¿La presión es la que hizo lanzar mal a Cristiano y Kaká?, le preguntaron. “¡No los han tirado mal!. Hay un portero enfrente que también está ahí para pararlos”, concluyó. Las paradas de Iker no bastaron.

Jupp Heynckes, el entrenador que le dio al Real Madrid la séptima Copa de Europa y que privó ayer a su exequipo de luchar por la tan ansiada décima, destacó la “maravillosa reacción” de sus jugadores tras recibir dos goles en tan poco tiempo. “Lograr lo que logramos en el Bernabéu es algo grandioso”, aseguró el entrenador alemán, que no quiso criticar ninguna actitud de Mourinho. “No comparto muchas cosas que se dicen sobre José Mourinho. De gente en la que puedo confiar solo he oído cosas buenas de él; su marcha al vestuario [tras el final de los penaltis] es algo normal tras la mala suerte de caer eliminado en los penaltis”, añadió. Karl-Heinz Rummenigge, presidente del Consejo Directivo del Bayern y una de las leyendas del club bávaro, aseguró que el triunfo de ayer “supera cualquier experiencia de los años setenta y ochenta. Ha habido fútbol de una calidad excepcional”.