“El Barça es superfavorito”

Le preguntaron a José Mourinho en TeleMadrid cómo veía las semifinales que enfrentarán al Bayern con el Real Madrid y al Chelsea con el Barcelona de Pep Guardiola. “Esa la tengo más clara, el Barça estará en la final”, contestó. ¿Por qué está tan seguro? “Porque son muy buenos”, dijo. Lo mismo repitió en sala de prensa cuando volvieron a preguntárselo. Calificó de “equilibrado” el duelo contra el Bayern a la vez que insistía en que los azulgrana ya están en la final. “No es que el Barça sea favorito, sino que es superfavorito”.

Se mordió la lengua el técnico. A su manera. Sobre todo cuando analizó cómo habían llegado sus chicos a las semifinales de Champions por segundo año consecutivo. “Hemos construido un equipo para ganar el partido porque la eliminatoria era prácticamente imposible perderla. Queríamos dar un poco de descanso a Marcelo, por eso he puesto a Altintop [se marchó entre los pitos del público del Bernabéu] a cubrir el lateral izquierdo. Para él sería más fácil jugar en una posición más acorde a sus características, pero siempre lo hemos utilizado de comodín. En el lateral sabíamos que no habría estado bien del todo. Han cumplido todos como profesionales y han hecho su trabajo. Es un gran grupo que hay que felicitar por dónde ha llegado en dos temporadas y por cómo ha llegado: con mérito”, explicó, insinuando que otros no pueden presumir de lo mismo.

Dice que el Barça ya está en la final ¿es entonces el Madrid-Barça la mejor final posible?, le preguntaron a Mourinho. “No veo por qué, el Bayern también sería un gran finalista. Tiene argumentos para ganarle al Real Madrid”, contestó. Le recordaron lo que había dicho Ibrahimovic la noche anterior, al marcharse del Camp Nou derrotado 3-1 con el Milan. “Ahora entiendo a Mourinho cuando viene al Camp Nou”, dijo el sueco quejándose del arbitraje. “Me parece que es un chico inteligente pero lo ha entendido tarde”, soltó el técnico del Madrid. Mourinho todavía está convencido que si los blancos no disputaron la final de la Copa de Europa el año pasado fue por culpa de los árbitros y no de la superioridad azulgrana. Kaká, en cambio, no cree en conspiraciones arbitrales: “Cuando salto al campo nunca pienso que el árbitro sale predestinado a perjudicarnos”.

Antes de despedirse, el técnico hizo el enésimo llamamiento a la afición. “Históricamente ha habido grandes Madrid-Bayern. El partido en Múnich se jugará en una atmosfera difícil… a ver si el Bernabéu puede recrearla en el partido de vuelta y llegar todos juntos a la final”, dijo celebrando el regreso de Di María. “Pensé que se me terminaba la Liga y que no iba a llegar”, confesó el argentino en zona mixta.