La peor actuación de la historia

Hay días en los que es mejor no levantarse de la cama o, como el caso de Antoine Wright, no pisar una cancha de baloncesto. El alero estadounidense del Estudiantes (Carolina; 1984), además de encajar una sonora paliza por parte del Barcelona Regal (97-51), protagonizó la peor actuación estadística individual jamás registrada en la Liga Endesa, con una valoración de -19, pulverizando la marca de -13 que hasta ahora compartían Berni Rodríguez (Unicaja), Rico Hill (Estudiantes) y Dani Pérez (León).

Desde el año 90, cuando la ACB comenzó a computar este apartado, en el que se suman los aciertos (puntos, rebotes...) y se restan los fallos (tiros marrados, faltas personales, pérdidas...), nadie había completado un partido tan desafortunado. Wright ha fallado todo lo que ha lanzado: siete tiros de dos puntos, tres triples y dos tiros libres. No ha sumado ningún rebote ni ninguna asistencia, ha perdido cinco balones y, para más inri, ha sido expulsado por cometer cinco personales. Un bagaje que pulveriza todo lo conocido hasta ahora.

Aún más curioso resulta que el jugador, que ingresó este verano en la disciplina colegial, había completado una gran primera jornada el pasado domingo. En la victoria ante el Valencia hizo una valoración positiva de 25. Sumó 22 puntos, tres triples, seis robos... El día y la noche. En ese encuentro, cumplió con la fama anotadora que le precedía en su llegada desde China, donde promedió 20,9 puntos con los Jiangsu Dragons.

Sin embargo, aunque no tan extremo como en estos dos primeros partidos, los altibajos no son un extraño para la carrera de Antoine Wright. Su buena carrera universitaria con Texas A&M le valió para salir elegido en el puesto 15 del draft de 2005, pero su trayectoria en la NBA no terminó de cuajar. Aunque contó con minutos durante algunos años (25 de media con los Nets en la 2007-2008; 24 con Dallas en la 2008-2009), ejerció de trotamundos, tras mostrar ya cierta inconsistencia en el lanzamiento, lo que le llevó a pasar por cuatro franquicias en seis temporadas, antes de que los Kings de Sacramento le cortaran la pasada campaña tras apenas siete partidos.

Al poco tiempo de empezar la pretemporada con el Estudiantes, dijo: "Mi primer día fue increíble". Aunque, bromeando sobre la dureza de los entrenamientos, apuntó una frase que podría ser la crónica de su actuación ante el Barça y las dudas sobre si su juego de aquí en adelante se parecerá más al de la primera jornada o al de la seguna: "Querían matarme [mis compañeros] y yo quería morir, pensé: ¿qué será lo próximo?". De momento, ya tiene en su haber el peor partido de la historia.

Liga Endesa: Barcelona 97-51 Estudiantes