El Zaragoza solicita el concurso de acreedores

El Real Zaragoza, con una deuda a terceros de 93 millones de euros, presentó ayer el concurso voluntario de acreedores en el registro de los juzgados de la capital aragonesa. El club ha confirmado hoy la información que había avanzado El Heraldo de Aragón, diario que cifra en 130 millones de euros brutos -107 millones netos- el pasivo del que dispone la entidad para hacer frente a la deuda. "Con el objetivo de salvaguardar los intereses, el patrimonio y en especial la viabilidad futura del Real Zaragoza, su Consejo de Administración ha decidido, por un elemental sentido de la prudencia, solicitar la protección judicial mediante la apertura de un concurso voluntario de acreedores", reza el comunicado hecho público.

"La sociedad se encuentra en estos momentos con la realidad de un desequilibrio en los flujos de caja", explica la nota; "cuyo origen principal hay que situarlo en las pérdidas que tuvo que soportar la entidad como consecuencia de haber perdido la categoría hace tres temporadas, y en el esfuerzo económico realizado para conseguir volver a la Primera División tan solo una temporada después". El juez tiene ahora un periodo de entre 15 y 30 días para decidir si el club es intervenido y puede renegociar así la deuda con sus acreedores. En caso de ser así, el empresario Agapito Iglesias, presidente y máximo accionista del Zaragoza, podría seguir al frente de la entidad. Eso sí, junto a los administradores concursales que fueran designados.

El equipo, que lleva años arrastrando una difícil situación económica, había intentado evitar esta solución. En 2010, por ejemplo, Iglesias presentó un plan de viabilidad a algunos de sus principales acreedores. Y a principios de año, el Zaragoza aceptó por fin vender a la gran perla de su cantera, Ander Herrera, al Athletic, que llevaba dos años intentando ficharle. Antonio Prieto, director deportivo del club maño, reconoció entonces que la operación, cerrada por 8,5 millones de euros más 2,25 por objetivos, tenía que ver "con las dificultades económicas" que atraviesa la entidad.

Varias circunstancias pueden haber influido en la decisión de solicitar el concurso de acreedores ahora. Una de ellas es la denuncia que el Getafe interpuso en abril por el impago de un pagaré de 950.000 euros correspondientes al traspaso del delantero nigeriano Ikechukwu Uche. Aunque un acuerdo entre los clubes acabó con la retirada de la denuncia, quedó patente la amenaza del descenso administrativo en caso de que otro acreedor reaccionara a un impago de la misma forma que lo hizo el equipo madrileño. Por otra parte, está el probable endurecimiento a partir de 2012 de las sanciones contra las entidades que tengan deudas.

Desde que en 2004 la Unión Deportiva Las Palmas se convirtiera en el primer club español en solicitar la intervención judicial, son muchos los equipos que han recurrido a esta medida para escapar de situaciones económicas críticas. El Zaragoza es el último.