Lendoiro denuncia amaños en el tramo final de la Liga

Enfrascado en el reto de devolver al equipo a Primera División, el presidente del Deportivo, Augusto César Lendoiro, no se recata en asegurar que algunos de los partidos del tramo final de la temporada han sido amañados. Y señala sin dudar a los futbolistas a través de una recomendación al presidente de su sindicato, Luis Rubiales. "Está bien que trabaje fuerte por defender sus derechos, pero también debería de hacerlo para que no se hagan amaños que se producen por acuerdo entre los propios jugadores", explica el dirigente más veterano del fútbol español.

Lendoiro no quiere señalar a ningún partido en concreto, pero apunta a la serie de inesperados resultados que complicaron el tramo final del campeonato para el Deportivo, finalmente descendido tras ser incapaz de marcar un gol en Riazor al Valencia en la última jornada. "¿Alguien lo duda?", se pregunta cuando le inquieren por si hubo componendas. Y avisa: "El pescado tiene una caña y esto se pescará, seguro".

Al margen de la decepción y las sospechas, Lendoiro ya trabaja en la nueva campaña. Está a punto de cerrar un acuerdo con el técnico levantino José Luis Oltra -"trabaja bien, tiene un buen manejo de la plantilla y le gusta jugar al fútbol, algo muy importante en A Coruña, justifica"- para que se haga cargo del equipo y apunta que tratará de mantener en el club el máximo número de futbolistas con contrato en vigor. "Si alguien piensa que vamos a malvender y que puede venir a pescar en aguas revueltas está muy equivocado", advierte.

La pasada semana estuvo en Madrid, allí negoció la llegada del nuevo entrenador y mantuvo reuniones "al más alto nivel". Se vio con el Real Madrid, con el que firmará un "contrato de buena relación" que puede derivar en la cesión de algunos futbolistas del filial e incluso tuvo tiempo de verse con Jorge Mendes, el representante que inició su carrera en el mundo del fútbol de la mano de Lendoiro con un acuerdo que hace quince años llevó al meta portugués Nuno al Deportivo. Desde entonces Mendes dice que Lendoiro es el padrino y él el ahijado. "Pues que lo demuestre", apostilla el dirigente gallego, que asegura que destacados directivos del fútbol español e internacional le han hecho llegar su simpatía. "Nadie regala nada, pero sabemos que no sienten lo mismo un descenso del Deportivo que de otro club. Seguro que nos van a ayudar".