Ballesteros sufre un empeoramiento severo de su estado neurológico

El estado neurológico de Severiano Ballesteros ha sufrido un "empeoramiento severo", según ha informado este viernes la familia del exgolfista. En una nota remitida desde Pedreña y publicada en su web, su familia indica que irá informando a medida que se produzcan nuevas noticias sobre su estado de salud.

Ballesteros, de 54 años, anunció en octubre de 2008 que sufría un tumor cerebral. Fue operado dos días después de que revelara su enfermedad, hecha pública tras desmayarse en el aeropuerto de Barajas y en un restaurante de Madrid en cuestión de horas. Días después, volvió a ser intervenido tras padecer un edema cerebral.

Los doctores Isla y Pérez Alvarez, que dirigen el servicio de neurología del Hospital de La Paz de Madrid, fueron entonces muy claros en su diagnóstico acerca de la enfermedad: tras las pruebas efectuadas, el enfermo presentaba dos tumores malignos, de gran tamaño, alojados en el cerebro. La planta del Hospital de La Paz donde fue ingresado Ballesteros pronto se convirtió en un búnker infranqueable. Solamente familiares y amigos íntimos pudieron visitarle. Ballesteros permaneció 72 días ingresado en el Hospital y fue intervenido hasta en cuatro ocasiones, a vida o muerte.

Seve se sometió a continuados ciclos de quimioterapia y, posteriormente, de radioterapia. También recibió diversas terapias de reeducación, puesto que el deportista perdió gran parte de la sensibilidad y coordinación motriz en el miembro superior izquierdo, la pierna izquierda y vista en el ojo izquierdo. Además, padecía dificultades en el habla. Seve regresó en junio de 2009 a la capital de España para presentar la "Fundación Severiano Ballesteros", cuyo objetivo principal iba a ser, entre otros, la colaboración en investigaciones contra el cáncer.

Su lucha contra la enfermedad a lo largo de estos años ha superado las previsiones de los especialistas.

Mito de alcance global

Ballesteros, uno de los deportistas con más impacto y popularidad fuera de España, ha ganado a lo largo de su carrera el Open Británico en tres ocasiones y el Master de Augusta en dos, además de ser el gran protagonista en el resurgir de Europa contra Estados Unidos en la Ryder Cup. Seve, como se le conoce popularmente en el Reino Unido, donde es un auténtico ídolo, ha ganado, además, 50 torneos del Circuito Europeo.

En una de sus últimas apariciones públicas en enero de este año, el capitán de la histórica Ryder de 1997 en Valderrama, felicitaba al nuevo capitán del equipo europeo, el español José María Olazábal, se mostraba optimista y aseguraba que "un hombre nunca se rinde". Poco antes, en octubre y ante el éxito del tratamiento con quimioterapia, el golfista aseguró que se encontraba "fuerte" y que estaba volviendo poco a poco a la normalidad.

Durante estos años de enfermedad, el mundo del deporte no se ha olvidado de él. Dos buenas muestras son el premio de la BBC a toda su carrera deportiva en 2009 y el homenaje que le rindió Phil Mickelson en la cena campeones de este año en el Másters de Augusta.

El comunicado familiar añade que "aprovecha la ocasión para agradecer todos los apoyos", que tanto Seve como la propia familia han recibido, e indican que serán ellos quienes informarán puntualmente sobre la situación del campeón español.