Mutai amenaza en Londres el récord de Gebrselassie

Londres en primavera, unos 15 grados, sol con alguna que otra nube y un 56% de humedad. Ese es el parte meteorológico de un día histórico para el prestigioso maratón de la capital inglesa, 30 años de vida, el día en el que el keniano Emmanuel Mutai paró el reloj tras 2 horas 4m 40s de sufrimiento, el mejor tiempo de la prueba, la cuarta mejor marca de la historia, a poco más de medio minuto de la plusmarca mundial de Gebrselassie (2h 3m 59s).

Mutai no es ningún novato. A sus 26 años el keniano lleva en sus piernas casi una decena de maratones en cuatro temporadas y es el vigente subcampeón mundial de la carrera más larga, la que mide no solo la resistencia física sino también mental de los corredores, la que se sabe cuándo empieza pero ningún corredor es capaz de asegurar si acabará.

En Londres no ha estado Samuel Wanjiru, compatriota de Mutai. El campeón olímpico está lesionado por lo que no ha podido defender su récord de la prueba. Pero sí estaba el etíope Tsegaye Kebede, que esta misma semana había asegurado que atacaría en las calles de Londres el récord de Gebrselassie, logrado en Berlín en 2008, pero solo ha podido ser quinto. Cuando Mutai cambió el ritmo en el kilómetro 33 ninguno de sus rivales pudo seguirle.

Antes se había quedado atrás Chema Martínez que, camino de los 40 años, había señalado este día en el calendario para conseguir la mínima para los Mundiales de Daegu (Corea del Sur) del próximo verano. "Él sabe correr solo, conoce a la perfección su cuerpo y se cuida, pero con su edad nunca sabes cómo va a reaccionar el cuerpo", reconocía su entrenador Antonio Serrano, también maratoniano, el primer español que bajo de las 2h 10m, un par de días antes antes de viajar a Londres, el ideólogo de los otros maratonianos españoles, como Pablo Villalobos y Alessandra Aguilar, que ya tienen pasaporte para Daegu.

Su cuerpo de 39 años, delgadísimo y fibroso, como el de los africanos, le ha jugado una mala pasada. "He salido muy rápido y a partir del kilómetro veintitantos he tenido problemas estomacales. He tenido que parar dos veces", reconocía el atleta a la agencia EFE después de la carrera. "He llegado medio muerto", ha dciho de su primera experiencia en el maratón de Londres.

"He arriesgado en busca de una buena marca, pero no sé si ha sido el calor o qué, pero he terminado mal. En un maratón tienes que estar perfecto", ha concluido. el subcampeón de Europa.

Martínez acabó en 2h 15m 20s oficiosos, que no sirven para su primer objetivo, el de clasificarse de forma automática para los Mundiales. Chema Martínez deberá esperar ahora a la decisión de los responsables técnicos de la federación, pues tiene la mínima internacional (2h 17m) , pero se ha quedado a casi un minuto y medio de la fijada por la española.