Drenthe vuelve a las andadas

La llegada de Miloslav Djukic al Hércules parecía una oportunidad para que Royston Drenthe volviera a demostrar que puede jugar a buen nivel en Primera División, como al principio de la temporada. Pero, tras una semana en el club levantino, el técnico serbio no ha dejado entrenarse al extremo holandés. Djukic ha impuesto una nueva norma en el vestuario y los jugadores deben llegar unos minutos antes de que se inicie la sesión preparatoria. Drenthe ha llegado 20 minutos tarde. Vuelta a las andadas.

El holandés, cedido por el Madrid, ha provocado varios incidentes esta temporada. Después de un buen comienzo de curso, cuando fue clave para que el equipo consiguiera un arranque prometedor, en noviembre le paró la policía a altas horas de la madrugada por circular a más de 160 km/h por las calles de Alicante y saltarse seis semáforos y una mediana. El jugador alegó que iba a urgencias pero aún así lo multaron. La polémica más sonada, sin embargo, fue después de las vacaciones invernales. Drenthe se había marchado a Holanda a pasar las Navidades y llegó una semana tarde a Alicante. Alegó que el club no le pagaba. El Hércules optó por abrirle un expediente disciplinario y ponerle una multa económica. A partir de ese momento, no tuvo continuidad y se ganó la enemistad de la afición.

Desde su llegada a España en verano de 2007, se ha hablado más de Drenthe por cosas negativas o extra futbolísticas que por sus logros con el balón en los pies. Debutó como titular con el Madrid en la vuelta de la Supercopa de España, a los pocos días de llegar a España, contra el Sevilla y marcó un gol desde el centro del campo. Aún así, el conjunto blanco perdió el trofeo. Fue de lo poco positivo que dejó en Chamartín. Poco después de ese partido, tuvo un accidente de tráfico en las calles de la capital y sus actuaciones en el campo generaban más dudas que esperanzas. No parece haber cambiado en el Hércules, donde Djukic no parece dispuesta a pasarle una.