"Me ofrezco como central"

"Me ofrezco voluntario para jugar de central". Así respondió ayer Busquets cuando se le preguntó por la posibilidad de que hoy ocupe el centro de la zaga del Barcelona en compañía de Abidal por las bajas de Piqué, sancionado, y Puyol, lesionado desde el partido contra el Racing. "No deberíamos estar tan preocupados por la alineación", prosiguió, "porque el año pasado ya recibimos también al Arsenal con ausencias importantes".

El dúo defensivo de la temporada precedente estuvo formado por Márquez y Milito. El mexicano ha causado baja y el argentino no pasa por su mejor momento de forma. Además, Milito es zurdo, igual que Abidal, circunstancia que obliga a pensar en un diestro como Busquets. Nada nuevo, por otra parte, si se tiene en cuenta que el Barça conquistó el triplete hace tres temporadas con Touré Yayá de central en algunos encuentros.

"Hay que reparar en los que juegan", terció Pep Guardiola, que ayer reapareció en la sala de prensa del Camp Nou tras ser dado de alta en la Clínica Dexeus, en la que ha pasado cinco noches por una hernia discal: "Estoy mejor", precisó; "no soy un héroe. El Barça liquida a todos y yo no voy a ser una excepción".

A Guardiola le obsesiona que su equipo pueda salir con la pelota jugada desde su área, de ahí que ya en la pretemporada pensara en Busquets y Abidal como centrales cuando se le preguntó si no había un déficit de defensas en la plantilla. El problema es que Busquets mezcla mejor como medio en la divisoria con Iniesta y Xavi que Mascherano, quien ocuparía la posición de volante central. "Jugaré donde me diga el entrenador. Me siento cómodo con cualquier compañero", repitió Busquets, que se estrenó como zaguero en la eliminatoria contra el Rubin Kazán.

"Iremos a atacar, a marcar goles, a por ellos", precisó Guardiola; "la afición nos llevará a los cuartos". La carga ambiental puede ser tan determinante como la racionalidad de Busquets, un jugador de gran inteligencia táctica. "No podemos perder la cabeza ni cinco minutos porque te cuesta la eliminación", advirtió el técnico. "Habrá que estar muy atento al contragolpe del Arsenal", avisó Busquets. "Necesitaremos atacar de modo ordenado", siguió, "porque, si no, tendremos problemas con la contra que tan bien dominan los ingleses".

Wenger suspira por la recuperación de Van Persie, un delantero vital para atacar los espacios y poner punto final al juego. Su posible alineación puede ser tan definitiva como la ausencia de Puyol, quien, curiosamente, no ha estado en ninguno de los partidos que el Barça ha perdido o empatado en el curso. "A nosotros quien nos preocupa es Messi", dijo Nasri; "ojalá esté calmado, tranquilo".