El Getafe, a doble o nada

Ángel Torres no da puntada sin hilo. Con el equipo instalado en una metódica irregularidad, el presidente del Getafe buscó alterar el sistema nervioso del grupo de Míchel. "Esta semana es la más importante; los partidos con Hércules (0-0), Atlético (esta noche, 20.00) y Sporting nos indicarán dónde vamos a estar: si entre los ocho primeros, sufriendo, o en tierra de nadie", analizó el pasado jueves -día en el que se conmemoraba el 65º aniversario del club-. "Es raro lo que nos está pasando este año, hay un buen equipo, una buena plantilla, pero ocurren cosas que no son normales. No hemos estado bien en la Copa ni en Europa, llevamos muchas lesiones y no terminamos de coger ni el ritmo, ni la regularidad", remató Torres.

Las palabras del mandatario azulón resumían la trayectoria de un equipo de contrastes. El Getafe es, hasta la fecha, el peor de 2011. Desde que empezó el año, los de Míchel suman seis puntos y tan solo una victoria en los últimos nueve partidos de Liga. Además, el día de Reyes el Betis le apeó de la Copa del Rey tras derrotarle en el Coliseum (1-3).

La racha actual remite a la que atravesó el club allá por el mes de noviembre cuando estuvo siete encuentros sin conocer el triunfo entre Liga, Copa y Liga Europa. Acto seguido, sin embargo, como si de una montaña rusa se tratase, los getafenses firmaron un histórico final de año con cuatro victorias consecutivas en Liga. Su mejor secuencia en las siete temporadas del equipo en Primera división.

A pesar de los altibajos, el Getafe firma un balance muy similar al de la pasada campaña -está un punto y un puesto por debajo que el año anterior a estas alturas-. Entonces, solo accedió a puestos europeos a tres jornadas del final, logrando la mejor clasificación del club en la máxima categoría (sexto puesto). Sin embargo el registro goleador del equipo (35 goles a favor y 38 en contra) remite al de hace tres cursos, cuando estuvo amenazado por el descenso hasta la última jornada. "Concedemos goles de manera exagerada. Queremos ser más estables. Hace falta más concentración y seguridad", analiza el técnico del quinto equipo que más goles recibe de la Liga.

Buscando el equilibrio, Míchel apostó hace unas semanas por la fibra de Casquero frente al ingenio de Parejo, que podría regresar hoy al once ante el Atlético. Pero todo lo que ha ganado en contención lo ha perdido en llegada. En las dos últimas jornadas ante Racing y Hércules el equipo solo encajó un gol (de penalti) pero en ninguno de los dos encuentros consiguió ver puerta.

Detrás de la estadística, un equipo ciclotímico que cuando gana, golea (ha marcado tres o más goles en 7 de sus 9 victorias), y cuando pierde, se descose. Doble o nada. Blanco o negro. Solo el Málaga (penúltimo) ha perdido más partidos como local que el Getafe. Solo los tres últimos de la tabla han encajado más goles que los azulones en su feudo. "Por momentos somos un equipo exquisito con el balón, pero nos falta sangre. Cuando no tenemos la pelota nos perdemos. Hay que aprender a correr y a sufrir", explicó Miku tras caer ante el Espanyol en una de las seis derrotas que los azulones han sufrido en el Coliseum. No es la única estadística preocupante para el equipo. El Getafe es, junto al Valencia, el que más expulsiones recibe de la Liga: siete tarjetas rojas. También es el equipo al que más penaltis en contra le pitan: nueve. A pesar de tanto lastre, solo le separan tres puntos de la séptima plaza que da acceso a la Liga Europa.

"Siempre miro la clasificación hacia arriba. No tengo motivos para mirar hacia abajo. Estamos más cerca de nuestro objetivo que de los problemas", cuenta Míchel. "El partido ante el Atlético es vital para nuestras aspiraciones. Nos enfrentamos a un equipo con una historia gloriosa pero que está a nuestra altura en la clasificación. Ganarles y superarles en la tabla es un reto grandioso para nosotros".

El entrenador, que finaliza su contrato al término de la presente temporada, tuvo una enigmática respuesta cuando hace unos días fue cuestionado por su renovación. "El presidente ya sabe lo que va a ocurrir conmigo", espetó. "La maleta, los rumores y los sustitutos son el pan nuestro de cada día para los que nos dedicamos a esto. También a mí me colocan en otros sitios, incluso en el paro", reflexionó en un discurso que sonó a despedida. A Ángel Torres ningún entrenador le ha durado más de dos cursos.