Milito y el abrazo de Pep

La mañana del lunes 3 de enero, Eduardo Gamarnich, representante de Gabi Milito, comunicó a Andoni Zubizarreta, director deportivo del Barça, que el jugador tenía la intención de abandonar el club en el mercado de invierno. Ona FM se hizo eco de la noticia por la tarde. Al día siguiente, Pep Guardiola confirmó la información y, algo dolido por la manera en la que el jugador comunicó su postura —"la puerta de mi despacho esta siempre abierta", le recordó el técnico— asumió el trastorno que causaría la baja de un central zurdo mediado el curso, pero le abrió la puerta: "Él decide", dijo Guardiola. Milito tenía ofertas de sobra para irse sin que se resintiera su economía, pero se queda. Así se lo comunicó el domingo al club. El lunes, 15 días después de la primera conversación entre su representante y Zubizarreta, se explicó.

"He reflexionado y pensándolo, entiendo que no es el momento. Disfruto del día a día, viendo al equipo desde fuera y disfruto cuando me toca participar. La mejor opción era seguir y seguir sumando desde el lugar que me corresponda, jugando o no" aseguro. Explicó también que se planteó irse por su deseo de competir. Pero que en el momento de la duda prefirió pensarlo. Y hablar con Pep.

El abrazo del entrenador le consoló: "He valorado muchas cosas antes de tomar la decisión, pero el motivo principal de que me quede es que Pep me considera importante. Al final lo único que me hizo dudar fue mi deseo de jugar. Por todo lo demás, estoy contento de estar en un lugar de privilegio; es muy difícil renunciar. Lo digo por el día a día, no solo por los partidos", aclaró antes de señalar a Guardiola otra vez: "El apoyo y la confianza de Pep han sido determinantes. Le pedí unos días y elegí continuar porque tampoco era el momento para dejar el equipo si me consideraba necesario. Eso al final es lo que más cuenta".

Milito desmintió que Messi le pidiera quedarse y que tenga asegurada su presencia en la selección argentina para la Copa América, y explicó las razones por las que fue su representante quien llamó al club y no entró él en el despacho del técnico: "Entendí que era importante que el club lo supiera, no me pareció justo moverme a sus espaldas. Pensé que a modo de agradecimiento debía saberlo primero el club". Llegados a este punto aclaró por qué a los futbolistas les cuesta tanto salir del Camp Nou: "Principalmente es por el día a día, por el diálogo permanente, más allá de quien juegue el fin de semana... por la armonía del grupo y del cuerpo técnico". Gaby Milito ha decidido seguir disfrutando en el Barça, convencido de que tendrá minutos para colaborar, y sus compañeros lo celebran tanto como Guardiola, que le abrazó y le hizo cambiar de idea.