Fútbol frente a política
La discreta puesta en escena española contrasta con la pasión inglesa, el colorido belga-holandés y la espectacularidad de la candidatura rusa
La sede de la FIFA en Zúrich ha acogido hoy la gala de presentación de las candidaturas que optan a la organización del los Mundiales de 2018 y 2022. Desde primera hora de las mañana, a las 08.00, las puertas se han abierto y los representantes de las cuatro aspirantes a la cita de 2018, entre las que figura España, han comenzado su exposición. La primera propuesta la ha ofrecido Bélgica y Holanda, que han recurrido al peso de jugadores históricos como Johan Cruyff, Ruud Gullit o Jean-Marie Pfaff para encabezar su proyecto.
Al discurso de todos ellos, que ha subrayado la importancia de establecer un nexo entre el deporte y la educación, se ha unido una puesta en escena muy visual. Vídeos en los que se podía observar a Cruyff haciendo malabarismos en las calles de Ámsterdam en su infancia o el trepidante viaje de Guus Hiddink por los banquillos de Corea, Australia y Turquía.
Frente a ese colorido, la candidatura ibérica (integrada por España y Portugal) ha ofrecido una presentación más funcional, focalizada en ensalzar los valores logísticos y de infraestructuras que plantea su alianza. Sin embargo, ha llamado mucho la atención que pese a la presencia de personajes de la talla de Iker Casillas, Eusebio, Vicente Del Bosque o Emilio Butragueño, ninguno de ellos ha tomado la palabra.
Sí lo ha hecho el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que en su discurso ha hecho hincapié en que "la capacidad organizativa" y "las ganas" de albergar el Mundial de 2018. También ha hecho hicapié en el hecho de ser "el primer destino turístico mundial" y en la "gran riqueza histórica y cultural" de España y Portugal. Como no podía ser de otro modo, el triunfo de España en Sudáfrica ha sido otro de los puntos que ha mencionado.
Tras él han desfilado el director de la candidatura, Miguel Angel López, y el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, que ha disertado sobre aspectos como "la historia del fútbol en la península ibérica, una historia en estado puro", o sobre los ataques que ha sufrido la FIFA en las últimas fechas a raíz de una serie de casos de corrupción. "La FIFA es limpia y hace las cosas con honestidad. Todos sois honestos y trabajadores y os preocupáis por el fútbol", ha destacado.
Posteriormente, Inglaterra ha exhibido toda su artillería. David Beckham, con permiso del príncipe Guillermo, ha sido la estrella estelar y el futbolista ha estado arropado, en formato vídeo, por apoyos de personajes como Alex Ferguson, Arsène Wenger o Roberto Mancini. La candidatura inglesa también ha aludido a la multiculturalidad del país y al deporte como factor de integración. No han faltado el primer ministro británico, David Cameron, que ha apelado directamente al jurado en su oratoria.
Para finalizar, Rusia ha hecho gala de un potencial económico extraordinario y también ha recurrido a celebridades como Yelene Isinbayeba, doble campeona olímpica, o el célebre Rinat Dasayev, ex portero de la URSS. Pese a la ausencia de Vladímir Putin, los rusos han ofrecido un repertorio espectacular de vídeos, datos y gráficos que ponen de manifiesto su capacidad organizativa.
"Creed en nosotros", ha rogado Andrei Arshavin, futbolista del Arsenal, al jurado presente en Zúrich. "Ha sido una presentación muy interesante. Solo puedo deciros una cosa: enhorabuena", ha concluido el presidente de la FIFA, Joseph Blatter. En estos instantes, el jurado etá reunido y a las 16.00 emitirá su veredicto.
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