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SEVILLA 4 - KARPATY 0

El Sevilla se pega un festín

Goleada y buen juego ante el Karpaty, desarbolado por la intensidad del equipo de Manzano

El día en el que Jesús Navas pasaba por el quirófano para solucionar sus problemas en el tobillo, el Sevilla disfrutó con la participación de dos jugadores de la cantera, Capel y Alfaro, para pegarse un festín europeo ante el Karpaty, un equipo menor en todos los sentidos que fue superado de principio a fin por el fútbol rápido y vertical del cuadro sevillano. El Sevilla perderá a Navas probablemente hasta el año que viene, pero se dio un baño de autoestima cuando más lo necesitaba, justo después de ser vapuleado en el Camp Nou. Las dudas que surgieron por su triste actuación en Barcelona se disiparon en una noche en la que casi todo salió redondo, pues el técnico Gregorio Manzano se encontró con la mejor versión de Capel, profundo y certero en el pase, y de Alfaro, goleador y eficaz. Es importante para el Sevilla recuperar a su segunda línea, hombres que brillaron ayer, como estos dos canteranos, como Negredo, Zokora, Cigarini, Escudé o José Carlos. Mientras, Kanouté, Renato o Luis Fabiano podían descansar de cara al importante encuentro del próximo lunes frente al Valencia. Por lamentar, algo, la lesión de Fernando Navarro, que se tuvo que retirar bastante tocado al descanso.

Sevilla: 4 - Karpaty: 0

Sevilla: Javi Varas; Konko, Martín Cáceres, Escudé, Fernando Navarro (Dabo, m. 46); Zokora, Cigarini (Romaric, m. 74); Alfaro, José Carlos, Capel (Perotti, m. 59); y Negredo. No utilizados: Dani Jiménez; Alexis, Kanouté y Luis Fabiano

Karpaty: Tlumak; Fedetskiy, Milosevic, Tubic, Avelar; Khudobyak, Godwin, Golodyuk; Kozhanov (Kopolovets, m. 68), Guruli (Tkachuk, m. 40) y Kuznetsov (Zenjov, m. 61). No utilizados: Rudenko; Petrivskiy, Tarasenko y Habovda.

Goles: 1-0. M. 09. Alfaro. 2-0. M. 30. Cigarini, de falta directa. 3-0. M. 42. Alfaro. 4-0. M. 50. Negredo.

Árbitro: Bülent Yildrim. Amonestó a Fedestkiy.

Unos 25.000 espectadores en el Ramón Sánchez Pizjuán.

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El partido, por lo demás, no tuvo demasiada historia. El alto ritmo que impuso desde el primer minuto el Sevilla desarboló al Karpaty. El equipo ucraniano no tiene nivel para competir en la elite europea y se encontró, para su desgracia, con un Sevilla con hambre, con jugadores con ganas de decirle a Manzano que quieren ser protagonistas. No hay nada mejor para un técnico que una plantilla picada en su orgullo y competitiva. Alfaro, de cabeza, y Cigarini, de gran lanzamiento de falta, encauzaron un partido que vivió momentos de mucha brillantez por parte del Sevilla en cada desborde Capel, en cada escapada de José Carlos o en las paredes de Cigarini.

Tanto se recreó en su juego el Sevilla que algún exceso de frivolidad le impidió redondear una goleada de auténtico escándalo. El Karpaty unió a su debilidad una dejación de funciones en defensa que propició una catarata de ocasiones para su rival. Llegaron cuatro goles al mismo tiempo que sobraban una enormidad de minutos. Encauzada la Liga Europa con este triunfo tan convincente, ayudado además por el empate entre el PSG y el Dortmund, el Sevilla respira mientras va configurando una nueva personalidad de la mano de Manzano. Llegarán citas más importantes que las de este Karpaty tan frágil, aunque nada mejor que actuaciones tan brillantes para ir preparando un camino que se presume muy duro, así en la Liga como en Europa.

Zokora y Negredo se abrazan tras el último gol
Zokora y Negredo se abrazan tras el último golALEJANDRO RUESGA

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