Contundente estreno del Baskonia

El Caja Laboral se estrenó ayer en la Euroliga paseando por el Buesa Arena ante un minúsculo Maccabi que ni olió oportunidades y poco pudo hacer ante la inspiración de los de Ivanovic, que, sin embargo, no se conformaron con poner el piloto automático.

El arranque del primer cuarto dio una pista sobre bien lo que ocurriría después. Un triple de Teletovic, el primero de un gran ramillete que contribuyeron a engrosar San Emeterio y Oleson, fue el pistoletazo de salida de un encuentro fácil para el Caja laboral e insufrible para el precipitado Maccabi de Tel Aviv. A los de David Blatt les falló casi todo y a los vitorianos prácticamente todo les salió bien. La gran acumulación de triples unida a una sólida defensa dibujaron en el marcador diferencias de hasta 26 puntos de diferencia entre ambos equipos que no bajaron de los 20 puntos llegado el segundo cuarto.

Los israelíes, maniatados, sólo lograban escapar del placaje del Caja Laboral cuando el sensacional ex del Granada, Hendrix y Blu entraban en escena. Las jugadas rocambolescas en las que cayeron los visitantes no dieron resultado mientras Huertas completaba la excelente labor de Teletovic, desasistido por Barac. El recién llegado Rancik protagonizó un buen choque y el lesionado Bjelica volvió a saltar a la cancha.

El Caja Laboral, que demostró su carácter en su reciente gira estadounidense, supo desarmar a los israelíes y selló un buen estreno en la Euroliga, una competición que no se le da especialmente bien.

Tras el descanso frenó el frenesí anotador de los locales en la primera parte y solo sobresalió, para bien, la gran actuación de Logan y, para mal, el despiste de Eliyahu en su regreso al Buesa Arena. No obstante, el Maccabi supo sacar la cabeza en el último cuarto y acortar distancias de la mano de Burstein, Eidson y Pnini ante un irreconocible Barac, inseguro y, por tanto, poco solvente. Los esfuerzos israelíes impidieron peores desastres, pero el choque siempre fue del Caja Laboral.