Servicio y volea
Estados Unidos desnuda a Rusia con una buena ración de defensa y contraataque (89-79)
Estados Unidos juega como un cohete y Kevin Durant se va a los 30 puntos un día sí y otro también. Difícilmente el conjunto estadounidense se topará con algún equipo capaz de detener esa combinación. Los chicos de la NBA juegan a una velocidad endiablada, no solo de piernas, sino de cabeza. Ejecutan las jugadas en su mente tan rápido como corren al contraataque, lanzados por una defensa que se toma las cosas en serio. Ya no es aquello de que cada uno haga la guerra por su cuenta en ataque y se apañe con el rival que le toque defender. Estados Unidos es mucho más equipo que otras veces. Y si el señorito Durant hace 33 puntos con su habitual repertorio de saltos y tiros lejanos...
EEUU 89 - RUSIA 79
Estados Unidos (25+19+26+19): Rose (6),Iguodala (6), Billups (15),Durant (33), Odom (6), -equipo inicial- Westbrook (12), Gay (0),Curry (2), Gordon (6), Love (0),Chandler (3).
Rusia (25+14+17+23): Bykov (17),Monya (5),Ponkrashov (3),Vorontsevich (14),Kaun (4), -equipo inicial- Fridzon (2),Zhukanenko (4),Khvostov (8), Voronov (9), Mozgov (13).
Árbitros: Reynaldo Mercedes Sánchez (DOM), José Martín (ESP), Jakub Zamojski (POL). Expulsado por cinco faltas el ruso Khvostov.
Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final del Mundial de Baloncesto que se juega en Turquía, disputado en el Sinan Erdem Dome de Estambul ante 10.000 espectadores. EEUU se clasificó para las semifinales.
Puestos a encontrarle un defecto, Estados Unidos sufrió durante el primer cuarto en la defensa del juego interior. Rusia hurgó en el punto débil estadounidense, la falta de pívots intimidatorios. Mozgov desnudó en los minutos iniciales el mecano americano. El pívot ruso estuvo más agresivo y los jugadores exteriores penetraron para lanzar o doblar el pase. Si Estados Unidos se impone por fuera, Rusia atacó por dentro, al corazón rival, siempre con mucha convicción. Llegado el momento de la verdad, los equipos han descubierto que Estados Unidos tiene una fisura bajo los aros (siete rebotes menos al final del encuentro). A Rusia le sirvió para abrir una pequeña brecha (30-35).
El lunar estadounidense no acabó en más porque el equipo tiene la pegada de un peso pesado y corre como una gacela. Rusia perdió fuelle, Estados Unidos se puso el traje de defender (14 balones robados), con Billups a la cabeza, y empezó a esprintar. ¡Y cómo corren! Rusia acabó con la lengua fuera. Rebote y contraataque, por la vía rápida. Servicio y volea. Así, a la contra, Estados Unidos sumó 22 puntos; Rusia, 2. Es difícil que alguien le aguante el ritmo al conjunto americano durante todo un partido. Cuando se pone a correr, es imparable. Tres partidos seguidos llevaba Estados Unidos aburriéndose como una ostra en el Mundial: contra Irán, Túnez y Angola. Contra Rusia agradeció por fin un poquito de emoción y competitividad. Pero acabó en paseo militar, como casi siempre.
Hoy se cumplían 38 años de la final de Múnich 1972. Fue la primera derrota olímpica del equipo estadounidense, ante la URSS (51-50). Entonces, en plena guerra fría, Estados Unidos se negó a recoger la medalla de plata en protesta por unas polémicas decisiones arbitrales finales. Ahora no piensa irse de Turquía sin el oro.
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