El camino sinuoso de Portugal
La selección lusa, que llegó al Mundial tras la repesca, ha alcanzado siempre las semifinales en caso de superar la primera fase
Los aficionados portugueses estuvieron a punto de despertarse del sueño del Mundial antes incluso de haberlo empezado. La noche del 14 de noviembre de 2009, el bosnio Dzeko saltaba para rematar de cabeza un balón contra la portería del portugués Eduardo en la ida de la repesca para el Mundial. En ese esférico iban depositadas buena parte de las ilusiones de Bosnia para disputar el campeonato. Dzeko la pegó bien, pero su disparo se estrelló en el larguero. El peligro para Portugal, sin embargo, no había pasado. El también bosnio Muslomovic se aprovechaba del rechazo y disparaba a puerta. El esférico volvió a encontrarse con uno de los postes de la portería de Eduardo, en esta ocasión el derecho. Todo el Estadio da Luz de Lisboa suspiraba aliviado. Portugal ganaba el partido por 1-0 y encarrilaba la clasificación. El marcador se repitió en la vuelta a favor de los lusos, que conseguían su billete para Sudáfrica con mucho sufrimiento. Ahora, ya están en los octavos y se miden con España.
La escena del remate de Dzeko muestra que la clasificación para el Mundial del próximo rival de España no fue, ni mucho menos, un paseo. Acabó segunda de su grupo, superada por Dinamarca, y solo un punto por encima de Suecia. Eso significaba que, mientras España pasaba al Mundial ganando sus 10 partidos, Portugal conseguía ir a la repesca por los pelos y lograba el billete gracias a un gol de Nani. España no tendrá que preocuparse por el extremo del Manchester United, que se ha perdido el Mundial a última hora por una lesión en la clavícula. Nada que le quite el sueño al técnico Carlos Queiroz, que ya superó el sobresalto grande al lograr el salvoconducto para Sudáfrica, justo para lo que le habían contratado tras relevar al brasileño Luiz Felipe Scolari, despedido al caer eliminado en los cuartos de final de la pasada Eurocopa de Austria y Suiza.
La gran sequía goleadora de Cristiano Ronaldo con su selección tiene buena parte de la culpa de los problemas de Portugal en la fase de clasificación para el Mundial. El jugador del Madrid no consiguió marcar en ninguno de los siete partidos que disputó. De hecho, Ronaldo no marcaba con la selección desde el 11 de febrero de 2009, cuando anotó de penalti en un amistoso ante Finlandia. En partidos oficiales, su mala racha era aún más grave: no marcaba desde el 11 de junio de 2008, cuando le metió un gol a la República Checa en la Eurocopa. En el partido frente a Corea del Norte, acabó con su sequía marcando uno de los siete tantos de su selección. Aunque tuvo bastante suerte, favorecido por un rebote en su espalda.
A pesar de los problemas de Portugal para llegar al Mundial, España no debe confiarse en el partido de octavos si se atiende a las estadísticas de la selección lusa en los Mundiales. Ha participado en cuatro campeonatos a lo largo de su historia y siempre que ha conseguido superar la primera fase ha llegado a semifinales. La primera vez fue en Inglaterra en 1966, cuando la selección liderada por Eusebio ganó todos los partidos de la fase de grupos y eliminó a Corea del Norte en cuartos de final después de remontar un 0-3 en contra. Ganaron, finalmente, 5-3, con cuatro goles de la Pantera Negra. Más recientemente, en Alemania 2006, Portugal también superó la primera fase ganando todos los partidos y llegó a las semifinales eliminando a Holanda e Inglaterra. Francia les envió de vuelta a casa. En Sudáfrica, el destino les encuadró en el grupo más complicado del Mundial a priori: Brasil, Costa de Marfil y Corea del Norte. Han quedado segundos, por detrás de la selección canarinha. Ahora, intentarán que España no les estropee la estadística.
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