O'Neal se pierde la temporada regular de la NBA

Malas noticias para los Cleveland Cavaliers. Shaquille O'Neal, el mastodóntico pívot de la franquicia de LeBron James, ha pasado hoy por el quirófano y se perderá el resto de temporada regular en la NBA. Shaq se lesionó el pasado jueves en el triunfo de los Cavaliers frente a los Boston Celtics al recibir un fuerte golpe de Glen Davis en el dedo pulgar de la mano derecha, que le provocó un esguince severo que ha tenido que ser corregido mediante cirugía. Se estima que su recuperación girará en torno a las ocho semanas, por lo que no llegaría a tiempo para disputar los partidos que le restan antes de los playoff, 22, repartidos entre siete semanas.

La noticia ha supuesto un grave contratiempo para las aspiraciones de Cleveland. Líder con solvencia de la Conferencia Este (hasta hoy, con un récord de 46 victorias y 14 derrotas), ve cómo su potente juego interior se ha desmoronado en tan sólo semana y media. Zydrunas Ilgauskas, sempiterno pívot lituano del equipo -jugó 11 temporadas y media-, fue incluido en la operación que trajo a Ohio al alero Antawn Jamison. Ahora, el contratiempo de O'Neal obliga a Mike Brown, técnico de los Cavs, a tirar del ex barcelonista Anderson Varejao, un intenso especialista defensivo, como center titular, toda vez que venciese el plazo para realizar transacciones con otros equipos.

La otra alternativa, J.J. Hickson, no parece una garantía suficiente como para afrontar los duros compromisos previos a la lucha por el anillo. Aunque no todo el panorama es negro: se espera que Ilgauskas regrese a la sombra de James tras comprarle su contrato a los Washington Wizards (su nuevo club tras el traspaso), por lo que al ser agente libre podría incorporarse de nuevo, aunque con el salario mínimo establecido por la Liga: un millón de dólares.

A sus 37 años, El Gran Aristóteles (como se autoproclama) constituye una baza muy importante para Cleveland en su lucha por suceder a los Lakers como nuevo campeón de la NBA. Pese a encontrarse a años luz del nivel que le llevó a ser elegido como uno de los 50 mejores jugadores de la historia y uno de los más determinantes, su generosísima constitución física, de 2,16 metros y 152 kilos, así como su inusitada rapidez en la ejecución de sus movimientos en el poste, siguen acompañando a Shaq, cuyos promedios este curso han sido de 12 puntos y 6,7 rebotes, vitales para hacer frente a los Dwight Howard, Tim Duncan y compañía.

Pero es consciente de que su vida deportiva se acaba, como predijo el 11 de septiembre de 2008 al declarar que su trayectoria "concluirá en 735 días", coincidente con el final de esta temporada 2009/10. Mientras llega tal fecha, O'Neal tratará de recuperarse a tiempo para intentar conquistar su quinto anillo, tras los tres conseguidos con Los Ángeles Lakers y uno con Miami Heat. LeBron James, santo y seña de los Cavaliers y en su último año de contrato, también lo espera. Ésta podría ser su última búsqueda del campeonato en su Ohio natal. De todas formas, en el verano de 2010, ya sin O'Neal, James dictará sentencia.