La juez 'obliga' a Alinghi y Oracle a navegar
El tribunal de Nueva York no estudiará la última demanda de los equipos hasta después de la competición, que comenzará el 8 de febrero
Para tranquilidad de las instituciones valencianas -Ayuntamiento y Generalitat- y del Gobierno central la Copa del América se celebrará a partir del próximo 8 de febrero, según lo previsto. Ningún enfrentamiento judicial más empañará el inicio de la competición náutica en aguas de Valencia. La jueza Kornreich, de Nueva York, que ya impulsó en su día la decisión de que las regatas se celebraran en la misma sede que la 32º edición, ha informado a los dos equipos, el Alinghi y el Oracle, de que no tomará ninguna decisión respecto de la legalidad de las velas con las que competirán los suizos antes de la prueba. De este modo, la lucha se traslada definitivamente de los tribunales al agua tras más de dos años y medio de litigio.
"Ha dicho que hay que navegar el 8 de febrero y que no habrá ninguna decisión ni ninguna vista oral antes de la regata", ha anunciado el dueño del Alinghi, Ernesto Bertarelli. Lo ha hecho esta tarde, tras la visita a la base de su equipo de los representantes públicos de las tres instituciones que integran el Consorcio de la Copa del América, que ha aprobado destinar a la cita 7,8 millones de euros. Allí, en la base del defensor del título, descansa ya la Jarra de las Cien Guineas, el trofeo que se podrá en juego en poco más de una semana y que cualquiera puede ver a partir de ahora.
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que ha asistido junto al vicepresidente de la Generalitat, Vicente Rambla, y el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Ricardo Peralta, ha ofrecido de nuevo la ciudad del Turia a Bertarelli -el mismo Bertarelli que prefirió Ras al Jaima a Valencia antes de que decidieran los tribunales- para que celebre la próxima edición de la Copa del América, a la que deberían incorporarse el resto de equipos que no han podido participar en esta 33ª edición, totalmente judicializada.
La novena y última demanda, pendiente de resolución judicial, la presentó el Oracle -el primero que llevó al Alinghi a los tribunales- por entender que las velas, de material estadounidense, no se ceñían al reglamento. El Alinghi contraatacó: su trimarán tampoco sería legal, apuntaron. Y la jueza ha dicho basta. Tomará una decisión cuando se hayan batido en duelo al mejor de tres regatas. De modo que, el vencedor en el agua podría perder el trofeo por decisión judicial.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.