_
_
_
_

Granollers doma a 'Perro Loco'

El español remonta dos sets para eliminar a Robin Soderling

Al arrancar el año, Robin Soderling derriba su última frontera y le anuncia al mundo que está dispuesto a todo, que es candidato a ganar cualquier torneo, que es un peligro para el Abierto de Australia: por fin, tras 13 enfrentamientos, gana a Roger Federer. Es, barrunta el vestuario, el año de 'perro loco'.

Ya ha llegado a la final de Roland Garros. Ya ha derrotado a Rafael Nadal sobre la arcilla parisina. Y ya ha preparado todo para escalar el último peldaño. Soderling, dolido en un codo, se prepara a conciencia para el primer grande del año. Sólo se le escapa un detalle: el español Marcel Granollers, que esta noche, entre calambres y casi con una sola pierna, le ha eliminado por 5-7, 2-6, 6-4, 6-4 y 6-2 en la primera ronda del Abierto de Australia.

Más información
Otro Federer, otro Nadal

El sueco, número ocho del mundo, estaba avisado: en Wimbledon 2009, Granollers, con su peculiar estilo de doblista abandonado por su compañero, siempre en la red, con sus brazos infinitos, voleador natural y sensible, le arrancó la primera manga y le dominó ampliamente en la segunda, que se le escapó nadie sabe muy bien cómo, para luego perder el partido (4-6, 7-6(7), 6-4 y 7-5).

Debió ser un momento doloroso para el número 113 del mundo. No en Melbourne. No bajo el frío de la noche australiana. No pese a las arremetidas del sueco y los problemas físicos: el español, al que tuvieron que atender por dolores en los cuádriceps con 4-1 de ventaja en la quinta manga, nunca había remontado dos sets de desventaja.

Soderling fue el único favorito eliminado, pero pudieron ser más. Mientras las nubes se volvían a reunir en el cielo de Melbourne, Federer se llevó un susto: ganó 4-6, 6-2, 7-6(2) y 6-0 al ruso Andreev, dejando sensaciones poco convincentes, sobre todo en la tercera manga, que dominaba cómodamente y a punto estuvo de escapársele.

También se dejó un set Fernando Verdasco ante el peligroso australiano Ball (6-7(4), 7-6(1), 7-5 y 6-2). Nicolay Davydenko, justo al contrario, justo al revés, insensible, frío y dañino, en acción el maestro de maestros: venció al alemán Kindlmann, que venía de la previa, por 6-1, 6-0 y 6-3. Tremendo.

Fernando Verdasco
Fernando VerdascoEFE
Robin Soderling, abatido.
Robin Soderling, abatido.AP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_