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Reportaje:Séptima jornada de Liga

Derrota y, ¿adiós?

Xerez y Villarreal se enfrentan por tres puntos y la posible continuidad de sus técnicos en el banquillo

La ratificación es el primer paso para la destitución. Es una ley no escrita y, sin embargo, habitualmente aplicada en el fútbol. Los resultados dictan sentencia. El negocio funciona así. Ernesto Valverde podría tener las horas contadas en el Villarreal de perder esta tarde (17.00, ppv) ante el Xerez en Xapín, circunstancia que situaría al conjunto castellonense como colista con tres puntos en sendos empates. En la misma tesitura se encuentra Ziganda en el banquillo jerezista tras dos igualadas en seis jornadas y que por el momento sitúan a los azules en última posición.

Que su equipo sea penúltimo incomoda sobremanera a Fernando Roig que estalló en cólera sintiéndose víctima de un complot para desestabilizar al Villarreal y dañar su imagen. Acusó a cierta prensa de dar informaciones destructivas y poco veraces. El detonante de la ira de Roig vino por la noticia difundida dos días atrás por un periódico deportivo que aseguraba que el Villarreal le había ofrecido a Luis Aragonés el banquillo de El Madrigal para sustituir a Valverde.

En los últimos días, el dueño del Villarreal se ha cansado de repetir la confianza plena que mantiene con el técnico que contrató para remplazar a Pellegrini. La tranquilidad siempre ha distinguido al club amarillo y sus tres dirigentes (Roig, su hijo Fernando y el consejero delegado, José Manuel Llaneza, asumen todas las decisiones) cuyo umbral de paciencia lo tienen muy elevado. "Es un club increíble", estimó Valverde tras el empate (0-0) ante el Espanyol en El Madrigal en la última jornada, consciente de que en cualquier otro lugar habría firmado ya su finiquito.

El caprichoso destino ha querido que Valverde tenga que ganarse la continuidad, tal vez, a costa de que un amigo pierda su trabajo. La situación de Ziganda es igual de desesperada pero en absoluto sorprendente. Algunos jugadores del Xerez, con una plantilla confeccionada a última hora con descartes de otros clubes, se conocieron en la primera jornada de Liga en el vestuario del Ono Estadi de Mallorca en el estreno de categoría. "Ya estamos acostumbrados a enfrentarnos a amigos y al final cada uno va a lo suyo. Uno hace lo posible por ganar y por estar encima del contrario", reconoce Valverde sobre la posibilidad de que la victoria ante el Xerez pueda suponer el despido del Cuco, con quien compartió vestuario y delantera en el Athletic. Tres puntos y dos cabezas andan en juego.

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