El Zaragoza se derrumba en Pontevedra
El cuadro maño se hunde en su crisis y da ilusiones al conjunto gallego de cara a la vuelta en la Romareda
El Pontevedra ahondó en la crisis del Zaragoza después de ganarle por la mínima (1-0) y mantiene vivo su sueño de clasificarse para octavos. El equipo de Víctor Fernández tuvo las mejores oportunidades del partido, pero un gol del argentino Víctor Ormazabal en la recta final del partido decidió el choque y deja en una situación complicada al técnico maño.
En la primera parte, el Zaragoza tuvo más posesión que su rival, llevó la iniciativa en el juego, pero fue incapaz de mostrar su superioridad ante un combativo Pontevedra. El equipo de Víctor Fernández movió el balón con lentitud, abusó de los pases en corto en el centro del campo y sólo en los últimos minutos del primer tiempo logró crear peligro.
Un claro ejemplo fue que la primera oportunidad de gol clara de los maños llegó sobrepasado el ecuador de la primera parte, después de un cambio de ritmo del argentino Pablo Aimar en el centro del campo, que le permitió marcharse de su marcaje, y sacar un magistral pase a la espalda de la defensa que dejó sólo a Oscar González, pero su disparo cruzado lo desvió Sergio Castaño en la misma línea de gol.
El Pontevedra, bien plantado y esperando su oportunidad al contraataque, respondió dos minutos después con un tiro del delantero ítalo-argentino Bianchi que se marchó rozando el poste para alivio del banquillo visitante. Con el paso de los minutos, el Zaragoza imprimió un ritmo más alto a su juego y obligó al Pontevedra a echarse atrás. Eso permitió que Gabi y Aimar entraran más en juego, y su equipo lo agradeció. A falta de diez minutos para el descanso, Oscar probó suerte desde treinta metros, pero se encontró con un seguro Mikel Saizar.
El Pontevedra, castigado físicamente, ya había renunciado al ataque después de que el Zaragoza le metiera el miedo en el cuerpo, y las figuras del Víctor Fernández encontraron más espacios para mostrar su calidad. Precisamente, de una acción individual de Oliveira nació la mejor ocasión de gol del Zaragoza, aunque Oscar González, después de regatear al meta Saizar, se empachó de balón y tardó en rematar, permitiendo a la zaga gallega echársele encima.
Pero no fue la última ocasión antes del descanso, ya que el Zaragoza, crecido, volvió a crear peligro tras un saque de esquina, pero el cabezazo de Zapater se estrelló en el larguero.
Un gol que derrumba al Zaragoza
Tras el parón, el encuentro fue más entretenido para los aficionados, con alternativas de gol en ambas áreas y un fútbol más ofensivo por parte del Zaragoza. No obstante, fue el Pontevedra el primero en avisar, después de un centro de Charles que no encontró rematador. A la voluntad del equipo gallego respondió el Zaragoza a cuentagotas.
El equipo de Víctor Fernández, que mantuvo el dominio del balón, sólo vivió de la calidad individual de sus futbolistas, como en el minuto 52 cuando Diogo envió el balón al palo. El Zaragoza dio vida al Pontevedra, dejó que los gallegos se crecieran, y lo pagó caro, ya que a falta de once minutos para el final apareció la figura de Xavi Moré. El vallisoletano, que acababa de entrar, puso el gol en bandeja a su compañero Víctor Ormazabal con un magistral centro pues el argentino sólo tuvo que poner el interior de su pie para enviar el esférico al fondo de la red.
Pasarón estalló de alegría tras el gol, y el Zaragoza se derrumbó. El equipo de Víctor Fernández se quedó sin ideas, era incapaz de acercarse al área local con peligro, y sólo en jugadas a balón parado inquietó, que vivió una noche histórica que le hace soñar con la clasificación para octavos.
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