Giggs aproxima al Manchester a cuartos

Un discutible tanto de Ryan Giggs logrado de falta cuando el Lille estaba colocando su barrera, permitió al Manchester United derrotar a la modesta formación francesa (0-1) y colocarse en buena disposición para alcanzar los cuartos de final de la Liga de Campeones. El enfado de los jugadores del Lille con el árbitro por no anular el tanto de Giggs en el minuto 83 fue tal que abandonaron el césped en señal de protesta durante unos minutos antes de volver al terreno.

El gol del astuto Giggs fue un premio excesivo para el Manchester, que no dejó en el campo constancia de la superioridad que le otorgaba la teoría y que pudo salir derrotado de su visita a Francia si los delanteros franceses hubieran tenido más puntería. La decisión del colegiado holandés Eric Braamhaar marcó un partido emocionante en el que se vieron muchas ocasiones de gol.

Saltó con descaro el Lille, un equipo ordenado y con disciplina que carece de la fantasía que precisan este tipo de partidos para marcar la diferencia. Inquietaron los franceses el área del Manchester en los primeros compases del partido con internadas por las bandas que se quedaron casi siempre en nada, sobre todo porque Bodmer y el nigeriano Odenwingie tenían negada la portería de Van der Sar.

Los ingleses tardaron 20 minutos en sacudirse el dominio del Lille, pero cuando pusieron el pie en el área francesa provocaron más sensación de peligro que sus rivales. Rooney estuvo a punto de aprovechar un buen pase de Scholes, pero su disparo fue alto. Luego siguió el acoso al área del Lille que pareció perder el norte del partido y que achicaba como podía la presión de Ronaldo, Larsson y Rooney, desacertados los tres en el último toque.

El partido se equilibró aunque las ocasiones de gol siguieron cayendo de ambos lados. Ronaldo pudo marcar en el 42 y tres minutos más tarde fue Bodmer el que lamió el poste inglés en un disparo lejano. El Manchester volvió de las duchas con la intención de hacer valer su calidad, y Rooney y Ronaldo dispusieron de dos ocasiones al contragolpe pero no marcaron. El colegiado rechazó un gol de Odenwingie en el minuto 62 por una rigurosa falta del delantero nigeriano, pero las protestas no llegaron al nivel que alcanzó tras el tanto de Giggs. Tras las protestas y, de vuelta al césped, los franceses se mostraron descentrados y el Manchester conservó sin problema su renta, que puede ser definitiva.