Berlusconi: "Ramón Calderón no turba mis noches ni mis despertares"
El presidente milanista asegura que Kaká no se marchará del club lombardo
Silvio Berlusconi, presidente y accionista mayoritario del Milán, ha negado durante la cena de celebración navideña del club milanés que su entidad pueda vender al delantero brasileño Kaká, señalando que no se turban sus sueños por las pretensiones del presidente madridista, Ramón Calderón.
"Desde luego, el presidente del Real Madrid, Ramón Calderón, no turba mis noches ni mis despertares con sus intentos de hacerse con Kaká. El sueño de Calderón seguirá siendo tal. No pienso ni en Calderón ni en Kaká, pues mi corazón está seguro de que el brasileño seguirá en el Milán", ha comentado Berlusconi. El presidente del Milán, además, ha querido marcar la diferencia existente entre la salida el último verano del delantero ucraniano Andriy Shevchenko (Chelsea) y una hipotética de Kaká: "La cuestión de Sheva no tiene nada que ver ni con el fútbol ni con el Milán; fue una cosa familiar. Con Sheva no fuimos tentados por el dinero ofrecido (45 millones de euros), sino que debimos sufrir una decisión que él mismo, a su vez, había sufrido de otra persona (su esposa). Fue una decisión impuesta por la familia; y a nuestras mujeres no se las puede decir que no", dijo.
Berlusconi también consideró de "pura fantasía" y de "invención periodística" que Kaká pensara en irse del Milán si el equipo no logra su clasificación para la próxima Liga de Campeones. El propietario madridista, asimismo, ha reafirmado su voluntad de hacer un Milán "protagonista", con los fichajes que sea necesarios y posibles. Y remarcó su confianza en el técnico Carlo Ancelotti, así como apuntó que él "no desilusiona nunca a nadie". Sobre Kaká, el administrador delegado milanista Adriano Galliani dijo: "Seguirá en Milán, no hay problema alguno. El Real no nos ha dicho nada, son los periódicos quienes dicen estas cosas". "Kaká tiene un contrato con el Milán por cinco años más y, desde luego, lo respetará", añadió Galliani.
Por su parte, el brasileño afirmó que sus deseos de seguir son "muy fuertes. Estoy muy contento de estas palabras (pronunciadas por Berlusconi en la cena de Navidad de la entidad), el Milán es un club muy grande, yo lo considero el más grande del mundo. Y mis ganas de seguir aquí son fortísimas", dijo Kaká, que estaba acompañado por su esposa.
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