Sin noticias del Madrid
El Getafe vence por la mínima al equipo de Capello
El Getafe venció ayer por 1-0 a un Real Madrid que apenas dejó constancia en el campo de su presencia. Ni Ronaldo ni Van Nistelrooy ni Raúl ni ninguno de los atacantes del conjunto madridista supuso una amenaza para el equipo local. A falta de un minuto para finalizar el encuentro, Ronaldo fue expulsado por doble amarilla. Con este resultado, el Madrid se aleja de los puestos de cabeza y suma su primera derrota de la temporada.
Era complicado tras la debacle de Lyon, pero lo consiguió. El Real Madrid completó en Getafe su peor partido de la temporada: desdibujado, apoyado en un doble pivote inexistente, con Diarra con síntomas de desesperación y Emerson siempre escondido a las espaldas del rival para construir, y con Guti y Beckham obligados a abandonar las bandas, dejando al equipo sin ningún poder ofensivo. Capello gesticulaba sin cesar ante el caos, reiteraba síntomas de desesperación en el banquillo en un primer periodo en el que, sin tirar a puerta ante la desesperación de Cassano y Van Nistelrooy -que sólo recibían balones largos fáciles para los defensores locales-, Iván Helguera salía del ostracismo para brillar con luz propia.
Helguera, titular
La revolución en el once y la epidemia defensiva provocaba un acto insólito. Helguera titular. El jugador al que mandó al olvido Capello, al que quitaron el dorsal -el 6- con el que ha ganado todo vestido de blanco, saltaba con el 21 a la espalda para liderar una zaga de circunstancias y ser ejemplo de profesionalidad. Cannavaro no estaba al cien por cien y Capello lo reservó para una semana que retratará al Real Madrid. Steaua en Liga de Campeones y la visita del Barcelona en Liga son dos encuentros de tal calibre que hasta el técnico madridista hizo descansar a Raúl, fresco tras su ausencia en la selección y en racha goleadora.
Todo el mérito se lo llevó el Getafe. Calentó el frío ambiente inicial por la floja entrada con un fútbol directo que nacía desde un doble pivote ejemplar. Cellestini y Casquero demostraron estar compenetrados. El primero destruía. El segundo siempre llegaba con peligro al área rival. En sus botas estuvo gran parte del peligro de un conjunto que inquietó en reiteradas ocasiones a Iker Casillas. Sin jugadores como Guiza, Sousa, Vivar Dorado y Albín, imprescindibles en un equipo que cada temporada vende y se reconstruye, el Getafe apostó por la verticalidad ante la indefinición madridista.
Dulce venganza
El enorme enfado de Capello en el descanso le llevó a renunciar a sus principios. Cambió radicalmente su apuesta futbolística y eliminó a Diarra para dar el mando a un creador, Guti, que no tuvo su día. Entraban en escena Raúl y Ronaldo, que se estrenaba como pareja ofensiva de Van Nistelrooy de forma testimonial. El balón pasaba a ser del Real Madrid y las ocasiones del Getafe.
Salvaba Iker un balón pegado al palo de Del Moral, como avisó del gol del triunfo local. Alexis, impecable en defensa, se elevó con poderío para alojar de cabeza el balón en la escuadra y hacer justicia. La fiesta local se desataba con un fútbol de adorno y Pachón, Paredes y Alberto, que chutó a la parte exterior del poste, perdonaban un triunfo mayor ante un Real Madrid que acababa desesperado, con Helguera lesionado en el campo y Ronaldo expulsado, que no estará ante el Barcelona. Fue la dulce venganza de Schuster.
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