La belga Justine Henin-Hardenne logra su tercera corona en Roland Garros

La belga Justine Henin-Hardenne ha ganado por tercera vez esta tarde el torneo de Roland Garros al vencer a la rusa Svetlana Kuznetsova por 6-4 y 6-4 en una hora y 36 minutos, para igualar con Arantxa Sánchez Vicario y además ser la segunda jugadora después de la española en 1994 de hacerse con el título sin ceder un set. Ganadora en el 2003 y 2005, éste es el quinto grande que Henin acumula ya en su palmarés, después de los tres logrados en París y los del Abierto de Estados Unidos (2003) y Abierto de Australia (2004). Y le sirve para olvidar de la final de este año de Melbourne, en la que tuvo que retirarse ante la francesa Amelie Mauresmo, cuando perdía por 6-1 y 2-0 debido a una gastroenteritis.

"Espero ponértelo más difícil la próxima vez", ha dicho Kuznetsova antes de que la estadounidense de origen checo entregara la Copa Suzanne Lenglen a Henin, quien ha dedicado el trofeo a su marido, a su familia y al entrenador, el argentino Carlos Rodríguez. Martina ha recibido también un recuerdo: un poster enmarcado de manos del presidente de la Federación de Tenis Francesa. "Gracias a Stefan [Ortega] con quien empecé a trabajar el año pasado. Te prometo trabajar mas a partir de ahora, y ser más inteligente, y gracias a Arantxa también", ha añadido.

"Ganar por tercera vez aquí es extraordinario, el torneo ha sido increíble", ha dicho por su parte Henin, quien ha levantado la Copa con orgullo. No es para menos: ha ganado el torneo ganando los siete partidos sin ceder un set. Un encuentro entre dos campeonas del Grand Slam (Kuznetsova ganó el Abierto de Estados Unidos en el 2004) merecía haber exhibido mayor calidad, pero en esta ocasión el brillo h estado ausente y ambas han cometido demasiados fallos, 30 la belga y 38 la rusa.

La superioridad de Henin

La notable superioridad de Henin en sus enfrentamientos anteriores (10-1) dispuso ya de entrada que la belga jugara con soltura, ausente de presión y dejara a Kuznetsova la obligación de llevar el peso del duelo. A diferencia del año pasado, cuando la rusa dispuso de dos bolas de partido contra Henin (7-6, 4-6 y 7-5) cuando dominaba por 5-3 en el tercero, esta vez no ha habido tanta batalla y Sveta ha cometido demasiados fallos, imperdonables en una final contra alguien que es capaz de adaptar su juego a cualquier superficie pero sobre todo a la de tierra batida.

Kuznetsova ha empezado mal al ceder de entrada su saque y dejar que su rival alcanzara una ventaja considerable de 4-1, pero quizá porque ha recordado que la táctica era presionar al máximo con su derecha, ha logrado remontar hasta el 3-4, e incluso dispuso de un punto de ruptura para igualar, pero su derecha se fue lejos. Henin ha aprovechado la siguiente oportunidad en que sirvió para cerrar esta manga en 50 minutos a la primera oportunidad. En la segunda la jugadora rusa, parecía haber aprendido la lección, cuando ha conservado su saque de entrada y ha quebrado el de Henin a continuación y se ha colocado con 2-0, pero de nuevo ha dejado escapar el suyo en el siguiente juego y el partido volvió a controlarlo Henin.

Las fuerzas parecían equilibradas pero Henin llevaba ya una ventaja psicológica, que se ha puesto en evidencia en el séptimo juego (4-3) al quebrar de nuevo el saque de Sveta. Justine ha necesitado la segunda oportunidad para cerrar el partido, después de que Kuznetsova lanzara muy lejos un golpe de derecha. Un nuevo regalo. La belga se lleva así el título 26 de su carrera y el tercero en esta temporada, después de los de Dubai y Sydney. Ha recibido un cheque por 940.000 euros, mientras que Kuznetsova se ha hecho con otro por menos de la mitad. Henin subirá del quinto al tercer puesto de la clasificación mundial y Svetlana del décimo al sexto.