El Espanyol se recrea ante un Málaga ya colista
Al Espanyol le fue de perlas la visita del Málaga. Imposible enfrentarse a un rival más idóneo para ganar vuelo y equilibrar ligeramente su deficiente balance en Montjuïc, donde sólo había ganado dos partidos. El Málaga culminó su calamitosa trayectoria. No es capaz de sumar un punto desde el 21 de diciembre y en Barcelona exhibió una indolencia extrema. Ya es colista y su entrenado Antonio Tapia puede tener las horas contadas.
El Espanyol exhibió en la primera media hora una frescura inusitada. Hacía meses que no se observaba en Montjuïc a un Espanyol con tal capacidad para liquidar un partido. Su pegada fue demoledora. Se prodigó la conexión De la Peña-Tamudo y se pudieron observar por fin detalles interesantes de algunos de los fichajes del pasado verano.
El brasileño Costa empieza a asentarse en el doble pivote junto a Ito. Dota al equipo de claridad posicional y empieza a marcar los tiempos, tanto en el repliegue como en el despliegue. El Málaga, pese a algún detalle de Bóvio, perdió por completo la batalla en el centro del campo. De la Peña, que jugó por la banda izquierda, se cebó con el ineficaz marcaje de Gerardo, y le dio a Tamudo dos pases de gol con una facilidad pasmosa. El capitán desperdició el absurdo penalti que Gerardo le hizo a De la Peña. El 3-0 lo anotó Luis García en una espléndida jugada iniciada por Juanfran. El Málaga no tuvo respuesta, salvo un golazo de Alexis, con un tiro muy lejano.