El Barça acaricia la Liga

El Barcelona no es que dependa de sí mismo. Es que si el Madrid pierde en Sevilla (sábado 20:00), el Levante le tendría que hacer ya el pasillo de campeón (sábado 22:00). El improbo esfuerzo madridista por alargar el estado de la cuestión del campeón ha obtenido contudente réplica por parte del Barça, que tras el descalabro del Bernabéu no ha encajado un gol y suma 10-0. Con estas cifras, que desalientan a cualquiera, la Liga es más culé, que ganando en el campo del Levante será también campeón. Muchos 'match-balls' como para que el título no se acabe el próximo fin de semana. Hoy en Mestalla, el Barça fue mejor. Golpearon sus figuras, Ronaldinho y Etoo, y vivió el encuentro instalado en la comodidad... salvo por las patadas del Valencia, que acabó con diez por expulsión a Marchena. Etoo, con su gol, se perfila como máximo goleador pese al acoso de Ronaldo. Laporta, que el sábado vivió la Champions del balonmano, ya tiene su primer éxito futbolero al alcance.

Mestalla se ha convertido en una plaza grande. De ahí su individualismo. Es decir, ni Barça ni Madrid. ¡Valencia! Es por eso que el recibimiento a los azulgrana fue de uñas, por mucho que la ola antimadridista haya barrido el lugar los últimos años. Pero como el Barcelona había desaparecido de la cumbre, su regreso fue tomado como una afrenta. Frente a ello, y con Losantos Omar examinado con lupa, el líder se aprestó a la misión de no dejarse intimidar. Un partido corrosivo, un tanto chato, como atenazados los protagonistas por la responsabilidad. Y es que había mucho en juego: una Liga y una plaza en Champions.

El Valencia se animó de la mano de Aimar, su talento (y a veces con Vicente, jugador de kilates), pero decepcionó con la pobre efectividad de Di Vaio. Entre tanto, el público la tomaba con el árbitro, por permisividad con las tarjetas a culés como Márquez. En una falta, Fabio Aurelio levantó a medio estadio, pero segundos después, el acabóse. Ronaldinho se largó el gol del campeonato, con un punterazo de derechas que superó a Palop con toda su rotundidad. Sin tiempo para el éxtasis visitante, ni para la depre local, Etoo culminó una contra del brasileño para burlar al débil Marchena y buscar el palo con criterio. 0-2 y a otra cosa, mariposa. Incluso en los momentos posteriores el Barça perdonó goles, como en una acción de Ronaldinho, otra de Xavi y una más clamorosa entre el camerunés y Giuly. El Valencia sólo opuso como reacción los malos modos de Sissoko y Ayala.

Rondo del Barça ante la desesperación del Valencia, sometido al toque sin descanso de su oponente. Perdonó el Barça, con Giuly fallón, y el Valencia se metió el encuentro mediada la segunda parte. Un cabezazo sin oposición de Marchena, que se comió Víctor Valdés, casi supone el 1-2. Mestalla reaccionó aunque rápidamente Marchena se encargó de acabar con el encuentro. Un mandoble a Deco, a la altura de la medular del campo y de la tibia del luso-brasileño, le apartó de la contienda por roja directa. Entonces, ni con Rufete ni Angulo el Valencia pudo dar la cara, en evidencia de su pésima temporada. El Barça contemporizó y, como no necesitaba nada más, dejó pasar el tiempo para que la tocaran Motta e Iniesta.