Tablas en un duelo con poco fútbol

Málaga y Mallorca, dos equipos en horas bajas, han firmado tablas en un duelo con mucha tensión y poco fútbol que complica aún más la situación de ambos. Los malaguistas descienden un puesto y se meten en zona de descenso, mientras que el conjunto balear sigue hundido en el penúltimo peldaño de la tabla.

El Mallorca, muy conservador, ha salido dispuesto a no arriesgar nada y ceder la iniciativa al rival para intentar golpearle a la contra. El equipo de Héctor Cúper se ha empleado a fondo en tareas defensivas y no ha dudado nunca en hacer falta para romper el ritmo de juego del Málaga. En el primer acto, los locales han dominado pero no han puesto a apuros al portero Moyá.

Se han empeñado en atacar siempre por el centro y eso ha facilitado el trabajo de la zaga del Mallorca. El equipo de Antonio Tapia no ha tenido fluidez y no ha sido capaz de romper la muralla de su adversario. Los únicos lanzamientos a portería con cierta intención de ambos equipos antes del descanso han sido a balón parado.

Un partido muy lento

El primero, en el minuto 20, una falta que ha tirado Luis García y que Arnaú ha detenido sin problemas; el segundo, un libre directo a favor del Málaga que ha lanzado Gerardo y que ha parado Moyá con facilidad. El segundo tiempo ha tenido más intensidad. Málaga y Mallorca han buscado más la portería contraria, pero las defensas se han impuesto a los delanteros y el reparto de puntos puede considerarse lógico por el desarrollo del encuentro.

El Málaga ha intentado acelerar el ritmo del partido, que ha sido muy lento en el primer tiempo, y ha buscado más los flancos para intentar superar la defensa del Mallorca, pero no lo ha conseguido y apenas ha dado trabajo a Moyá. El equipo balear ha estado perfecto en defensa. La mejor ocasión de gol del Málaga ha llegado en el minuto 52, tras un contragolpe llevado por Miguel Angel que finalmente ha desaprovechado Baiano.

El Mallorca ha podido desequilibrar la balanza poco después, en el minuto 52, con un tiro libre de Arango que se ha estrellado en el travesaño de la portería de Arnau. Málaga y Mallorca han convertido la recta final del partido en un ida y vuelta de una portería a otra, pero la falta de ideas de unos y otros ha imposibilitado que el marcador se moviera.