Hewitt vence a Roddick y disputará la final ante Safin

Lleyton Hewitt, campeón de Wimbledon en 2002 y del Abierto de Estados Unidos en 2001, ha sacado fuerzas de donde parecía imposible, ha olvidado el cansancio acumulado y ha completado una nueva hazaña tras desarmar al estadounidense Andy Roddick y convertirse en el primer australiano que alcanza la final en Melbourne desde Pat Cash en 1988. El australiano se impuso a Roddick por 3-6, 7-6 (3), 7-6 (4) y 6-1, a pesar de que el americano logró 31 saques directos, uno de ellos a 231 kilómetros por hora, y de que estaba, en teoría, mucho más fresco que él.

"Siempre dije que haría lo que fuera para tener la oportunidad de jugar la primera final y ahora tengo mi gran oportunidad. No obstante, Marat (Safin) ha vencido al mejor jugador que hay ahora mismo (Federer) y lo está haciendo extremadamente bien. Tendré que subir el nivel de mi juego de nuevo y ver luego que sucede. Es increíble estar en la final, toda mi preparación está pagando dividendos ahora", ha afirmado.

Hewitt, fiel a su caracter combativo, no se ha doblegado ante los problemas físicos que se han reproducido en su cadera o ante las "batallas" que debió afrontar durante estas dos semanas y es que, salvó su encuentro inicial ante Clement, no ha logrado cerrar ningún otro en tres mangas. Con esa fuerza mental se enfrentará en su primera final en Australia al ruso Marat Safin, que ayer se clasificó para la final tras vencer al suizo Roger Federer en cinco sets.