La Vuelta a España 2005 apuesta por la montaña

La sexagésima edición de la Vuelta a España, cuyo recorrido oficial ha sido desvelado este miércoles, apuesta por la montaña, con seis finales en alto, sin olvidar las oportunidades de los contrarrelojistas, que tendrán 84 kilómetros repartidos en tres jornadas. La Vuelta será una carrera dura, según muchos de los protagonistas que han acudido a su puesta de largo. La prueba, debido a la remodelación del calendario con un nuevo sistema de competición marcado por el polémico ProTour, comenzará el 27 de agosto en Granada y terminará en Madrid el 18 de septiembre.

Por medio, se disputarán cerca de 3.239 kilómetros repartidos en 21 etapas, de las cuales seis de ellas tendrá la línea de llegada en alto, en las cimas de la estación de Valdelinares (Teruel), en la estación andorrana de Ordino Arcalís, Cerler, el alto Virgen de la Bien Aparecida, Lagos de Covadonga y el final en la estación asturiana de Valgrande-Pajares. Seis llegadas en alto a las que hay que añadir tres de las catalogadas de media montaña, especialmente los dos últimos días por carreteras de la sierra de Gredos, por las provincias de Avila y Segovia y la madrileña de la estación de Navacerrada y sus alrededores.

Un perfil más montañoso que en las últimas ediciones, aunque esta perfectamente combinado con las jornadas llanas, que serán nueve, y con las cronometradas, que están ubicada en momentos claves. El colofón, los últimos 140 kilómetros, tendrán por escenario un circuito de Madrid y sus alrededores donde una semana después se disputarán los campeonatos del mundo de fondo en carretera.